Hague promete que bajará los impuestos y la gasolina
Sudoroso, muy sonriente y enarbolando un ejemplar del programa electoral 'pleno de sentido común' con el que aspira a convertirse en el próximo primer ministro británico, William Hague, líder de la oposición conservadora, prometió ayer a los votantes un recorte general de impuestos evaluado en 8.000 millones de libras (unos 2,1 billones de pesetas), además de una rebaja de 6 peniques por litro de gasolina (16 pesetas). Dos ambiciosas ofertas netamente electorales que tanto el Gobierno laborista como el partido liberal demócrata calificaron de insensatas y hasta engañosas.
Hague es un buen orador, pero tiende a no modular lo bastante su voz cuando aborda lo que él mismo califica de 'grandes preocupaciones del británico medio'. De ahí que sus discursos puedan perder fuelle a pesar de sus esfuerzos por convertirse en portavoz cualificado de las clases medias. Durante su comparecencia de ayer volvió a ocurrirle algo parecido. Alzó mucho la voz para presentar el programa electoral conservador como 'el más ambicioso en una generación', llamó casi a gritos a la ciudadanía a 'construir entre todos el país' para, al final, sacudir al votante con el clásico reclamo del recorte de impuestos.
Según el líder conservador, los laboristas han desperdiciado cuatro años de ejercicio del poder y sólo la oposición está preparada para aligerar, en unos 8.000 millones de libras, la carga fiscal de familias, pensionistas y pequeños ahorradores. A los automovilistas Hague les prometió además un recorte de seis peniques por litro de gasolina. El líder tory arremetió contra los laboristas por no haber defendido lo suficiente al Reino Unido frente al poder de Bruselas.
