Una muestra recoge la alegría de vivir del fotógrafo Ed van der Elsken

Su última película, Bye, es su despedida del mundo tras saber que padecía un cáncer terminal. Sin embargo, todos sus trabajos transmiten la alegría de vivir que acompañó al creador hasta la muerte. De formación autodidacta, Van der Elsken se movió siempre a partir de dos principios: el deseo de mostrar una imagen lo más próxima posible del sujeto retratado, hasta el punto de que muchas veces él es protagonista de sus fotografías, y una obsesión por la técnica que le llevaba a trabajar incansablemente las imágenes en el laboratorio hasta conseguir que transmitieran la emoción del momento en que las había captado.

Con una curiosidad inagotable y la vocación de hacer amigos gracias a su trabajo, Van der Elsken mostraba vidas ajenas con una gran pretensión de autenticidad, aunque a veces fueran inventadas. Sus fotografías y películas (reportajes y documentales para el cine en formatos super-8, película en color de 16 milímetros y vídeo) se consideran documentos históricos sobre el modo de vivir en las décadas de los sesenta a los ochenta. La exhibición, producida por el Kubnstmuseum de Wolfsburg, arranca con la serie de fotografías que cimentarían su prestigio, incluidas en la novela fotográfica Une histoire d'amour à Saint Germain des Prés, en la que explicó una historia inventada a partir de las imágenes captadas en el barrio parisiense.

Eye love you se estructura en otros ocho apartados, dedicados a sus libros Amour, Bagara y Sweet life; las imágenes tomadas en París entre 1949 y 1954; la colección de fotografías dedicadas a músicos de jazz, una de sus grandes pasiones, y las imágenes tomadas en Japón, el país que más le impresionó de cuantos visitara, y en Amsterdam. Esta última ciudad fue el escenario en el que Van der Elsken desarrolló un interesante trabajo relacionado con el cuerpo humano y con el sexo. A finales de la década de los sesenta, en plena revolución sexual, el fotógrafo pedía a sus amigos y conocidos que le permitieran retratarles mientras hacían el amor, y también se fotografió a sí mismo desnudo en la cama junto a su compañera.