PSOE y nacionalistas recelan de la futura ley autonómica del PP

El PSOE descalificó ayer la propuesta del Gobierno al señalar, por boca del presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que la ley de cooperación es 'absolutamente decepcionante, centralista y renacionalizadora'. 'No puede funcionar y será totalmente ineficaz si no incluye un Senado como auténtica Cámara de representación territorial' como principal tema pendiente del proceso autonómico, y al que el Gobierno ha renunciado.

El portavoz socialista en el Senado, Juan José Laborda, aboga por una reforma constitucional que haga del Senado una Cámara territorial, con capacidad para tomar la iniciativa en toda la legislación autonómica y con el reconocimiento de los hechos diferenciales de las nacionalidades (País Vasco, Cataluña y Galicia). 'Existen mecanismos constitucionales inexplorados que pueden servir para integrar al nacionalismo democrático en el Estado autonómico'.

Como botón de muestra, Laborda avanza que los grupos territoriales de las nacionalidades en un Senado reformado podrían tener capacidad de acudir al Tribunal Constitucional y paralizar un proyecto de ley que afectase a hechos diferenciales como la lengua.

CiU recela de la ley, pero su portavoz en el Congreso, Xavier Trias, consiguió ayer garantías del vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, de que dicha ley no supondrá recorte autonómico y se limitará a regular la cooperación entre las comunidades, informa Josep Garriga. 'Será útil para buscar herramientas de colaboración, pero siempre que no se vote', dijo Trias. No obstante, CiU apuesta a largo plazo por una reforma constitucional del Senado en la que los senadores sean elegidos por las comunidades autónomas, y por un reconocimiento de los hechos diferenciales como propone el PSOE.

El PNV mantiene posiciones más duras. Su portavoz, Iñaki Anasagasti, señaló que es 'aberrante' porque 'va en contra del espíritu de la Constitución y el Estatuto'. 'El Gobierno no se entera de que Europa se está haciendo', en alusión a los acuerdos de la cumbre de Niza y a la propuesta alemana de distribuir las competencias en el 2004 entre la UE, los Estados y las regiones.

El BNG calificó, a través de su portavoz Francisco Rodríguez, que 'no hay duda de que estamos ante un proceso recentralizador del Estado, ante una nueva LOAPA'. Precisó que el Gobierno con este ley 'renuncia a avanzar hacia un Estado federal o confederal', sobre todo por no afrontar la reforma constitucional del Senado, informa Xose Hermida.

Isidre Molas, portavoz de Entesa -que agrupa al PSC, ERC e IC- aseguró que esta ley es 'un menosprecio y respira neocentralismo' e insistió en que 'sin reforma constitucional no habrá un Senado sólido y estable'.

Tanto Entesa, PNV, BNG como CiU coinciden con el PSOE en que el principal problema pendiente del Estado autonómico es la reconversión del Senado en Cámara territorial a través de una reforma constitucional. Los socialistas contemplan este horizonte en el año 2004, en que la UE tendrá que debatir las propuestas de la cumbre de Niza.

También para ese momento habrá culminado esta legislatura, en la que la mayoría absoluta del PP impide una reforma de entidad en el Estado autonómico, incluida la del Senado.

El vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, ha aclarado que 'el modelo alemán, con un Senado convertido en Cámara de los Gobiernos autonómicos, hace inoperante la gobernabilidad de los Estados' y que 'los propios alemanes se están replanteando su modelo'.

El ministro de Administraciones Públicas, Jesús Posada, anunció ayer que los próximos 23 y 24 de abril empezarán los seminarios previos con catedráticos y funcionarios para avanzar en una propuesta que culminará en el proyecto de Ley de Cooperación Autonómica. Posada negò que el Gobierno pretenda hacer de esta ley 'una nueva LOAPA'.