Israel mata a un jefe palestino con un teléfono bomba accionado desde un avión

El asesinato de Hardane, de 30 años, se produjo en el centro de la ciudad autónoma de Jenin, en Cisjordania, cerca de un cuartel de la policía palestina, en el que debía presentarse tras salir hace un mes en libertad provisional. El artefacto se encontraba en el interior del teléfono público, y al parecer fue accionado a distancia por un avión no tripulado israelí, según los testigos presenciales. En el momento en que Hardane se disponía a efectuar una llamada, la cabina explotó.

La ejecución sumaria de Hardane ha tenido lugar tres días después de que otro dirigente del movimiento fundamentalista Yihad Islámica muriera al se alcanzado por dos misiles, cerca de Rafa, en la franja de Gaza, en una operación que los servicios de seguridad israelíes calificaron de 'preventiva'.

En esta ocasión, un portavoz del Gobierno de Sharon se mostró menos ambiguo y calificó la operación de un éxito policial, al asegurar que las manos de la víctima 'estaban manchadas de sangre y en su cabeza bullían planes para hacer correr aún más sangre'. Esta política cuenta cada vez con más críticos en la sociedad israelí.

En diciembre, los servicios secretos del Ejército israelí enviaron a Hardane una advertencia clara al asesinar en Nablús a su hombre de confianza, Anwar Himran, de 28 años y estudiante de la Universidad Al Quods, mientras salía de la facultad en compañía de su esposa. La muerte de este dirigente de la Yihad fue responsabilidad de un francotirador de élite israelí, quien, apostado en una colina cercana, logró incrustarle 20 balas en el cuerpo. Himran, como ahora Hardane, se encontraba en libertad provisional por una decisión personal de Yasir Arafat, decretada en la estrategia de potenciar la Intifada.

El asesinato de ayer echa por tierra las exiguas esperanzas de los servicios de espionaje estadounidense CIA, que, de acuerdo con la Casa Blanca, había tratado en las últimas horas de restablecer los canales de diálogo y colaboración entre los servicios de seguridad israelí y palestinos, tras dos meses de bloqueos, silencios y violencia.

La televisión pública israelí informó anoche de que en el kibutz de Netiv Haassarah, limítrofe con la franja de Gaza, se habían registrado varias explosiones de obuses. La misma emisora señaló que el kibutz de Nissanit, más al norte, también estaba siendo atacado.