La Generalitat cerró el año con una deuda que roza el billón de pesetas

En el informe anterior, relativo al tercer trimestre del año 2000, el Banco de España cifró el endeudamiento de la Generalitat en 901.146 millones de pesetas, pero al cruzar los datos del último trimestre la deuda alcanzada roza ya el billón de pesetas, siendo la valenciana la Administración que más viene incrementando su deuda en los últimos años, doblando con creces la que registró en 1995, el año en que el PP se hizo cargo del Consell. En esta cantidad se incluye la deuda de la administración general de la comunidad, las universidades de su ámbito y los organismos y empresas administrativas, así como los organismos autónomos no administrativos, entes y empresas dependientes de la comunidad no clasificados como administraciones públicas.

En diciembre de 1999, la Generalitat tenía una deuda acumulada de 814.459 millones de pesetas y doce meses después ha redondeado esta cifra hasta 980.013 milones, lo que supone un aumento del 20,3%. Sólo Cantabria supera este porcentaje en unas décimas, aunque con cifras bastante más modestas, pasando de los 35.772 millones de 1999 a los 43.260 del año 2000.

De acuerdo con los datos suministrados en el último estudio, el endeudamiento de las comunidades autónomas viene creciendo de forma ininterrumpida en los últimos años, y se ha incrementado en el último quinquenio en casi un 47% al pasar de 4,3 billones en 1995 a 6,3 a finales de 2000. Sin embargo, tres comunidades autónomas lograron reducir su deuda. Es el caso de Extremadura, Navarra y el País Vasco, que fue la Administración que más redujo su deuda, rebajándola en un 10,2%, al pasar de 321.000 millones a 288.000.

La clasificación de comunidades con mayor endeudamiento en términos absolutos sigue encabezada por Cataluña, con 1.566.025 millones (un 0,5% más que en 1999), seguida de Andalucía, con 1.147.065 millones (un 9% más que en el ejercicio anterior) y la Comunidad Valenciana. En tanto que las menores deudas corresponden a La Rioja, con 23.000 millones, y Cantabria, con 43.000.

Por el contrario, las corporaciones locales (ayuntamientos y diputaciones) sí que lograron reducir sus endeudamientos, ya que a finales del año 2000 acumulaban una carga de 3,1 billones, un 3,5% menos que el ejercicio anterior.