Casi un centenar de afectados por el coche bomba de Gandia acude a solicitar ayudas

Los técnicos del consorcio valorarán los daños que la onda expansiva de la voladura -que afectó a un área de unos cien metros a la redonda- causó en varios bienes inmuebles, y agilizarán los trámites para que los propietarios afectados sean indemnizados lo antes posible. Los peritos iniciaron las inspecciones el martes en los locales de ocio situados cerca del vehículo cargado con más de 40 kilos de explosivos, en la confluencia de la calle de La Ràbida con el Paseo Marítimo. Un restaurante-pizzería, un pub-discoteca, y un café, ubicados en los bajos de la finca Bonaire, fueron los más perjudicados por la detonación controlada del coche.

Ayer, la concejal de Seguridad Ciudadana, Liduvina Gil, manifestó que las viviendas situadas en los primeros tres pisos del edificio se han visto gravemente dañadas, aunque hay desperfectos menores (en tallas, tabiques, ventanas y persianas) en casi toda la finca, de 13 plantas y 200 apartamentos.

Ayer se inició también la evaluación de la situación del hotel Riviera, ubicado enfrente del lugar de la explosión. De las 72 habitaciones del inmueble, de cinco plantas, sólo ocho se salvaron de la onda expansiva y no han sufrido perjuicios considerables. Las habitaciones situadas en la parte exterior, con vistas a la calle de La Ràbida, quedaron al descubierto ya que la detonación destrozó la mayoría de balcones. El alcance de los daños en el hotel abre la posibilidad de derruirlo y construirlo de nuevo, o bien de remozarlo por completo para convertirlo en apartamentos siempre que el estado de su estructura lo permita. En todo caso, los propietarios esperarán al informe de los peritos para tomar una decisión al respecto.

Además, el Consorcio de Compensación de Seguros ha estimado en más de 30 millones los daños que la voladura del coche bomba causó en una veintena de vehículos estacionados en sus proximidades. Seis han sido declarados siniestro total, y una decena sufrió graves daños. Los propietarios de los vehículos menos afectados empezaron ayer a retirarlos del parque móvil municipal. La cuantificación global de los daños todavía no ha sido precisada.

Liduvina Gil aseguró que este fin de semana podría permitirse a los dueños de las viviendas y locales acceder a sus propiedades e iniciar los trabajos de limpieza y reparación de daños. El tabicado de puertas y entradas del edificio para evitar posibles robos hasta que la finca sea rehabilitada se inició ayer. Algunas de las viviendas eran primeras residencias, y unas 40 personas, según fuentes municipales, serán realojadas temporalmente en apartamentos alquilados por el Consistorio hasta que finalicen las obras de reconstrucción de la finca.