'Centroamérica no tiene padres, está huérfana de líderes'

A sus 58 años, es el obispo más antiguo de El Salvador, y una de las voces que con más fuerza se han alzado a favor de dar protagonismo a la sociedad civil para afrontar los daños de dos terremotos que, en sus palabras, 'han sumido al país en la desesperanza'. Monseñor Gregorio Rosa Chávez, que ha estado presente en la reunión entre líderes centroamericanos y donantes internacionales que tuvo lugar la semana pasada en Madrid para arrancar ayuda económica e inversiones en la zona, prefiere hablar de 'construir un país nuevo', más que de reconstruir.

'Con la cuarta parte de la población damnificada -hay un millón y medio de personas sin hogar-, con una cifra de muertos que oficialmente asciende a 1.200, pero que calculamos que puede llegar a los 4.000, hay que replantearse el modelo de país, darle el protagonismo a la gente como interlocutora del poder'. Las claves de la reconstrucción: la participación ciudadana y el control social de la ayuda. 'En el tema de descentralización de los recursos se avanza muy lentamente. Hace dos años se consiguió que el 6% de los presupuestos los gestione el municipio, que es el que mejor conoce las necesidades de la gente'. Sin embargo, piensa que sigue existiendo una gestión politizada de las ayudas. 'Santa Tecla -la zona residencial que sucumbió bajo un alud de tierra tras el segundo seísmo- es un ejemplo de cómo el fanatismo político puede llevar a aumentar el sufrimiento de la población. El Gobierno impidió sistemáticamente que llegara la ayuda, porque el alcalde no era de su partido'. Ese municipio es además ejemplo de falta de previsión de riesgos. 'La alcaldía, que está en manos de la oposición denunció a la constructora ante la justicia, porque consideraba que era una zona no apta para construir. Pero la constructora ganó el pleito. Tras el desastre, el Gobierno tuvo que declararla finalmente zona de alto riesgo'. Para el obispo, el último seísmo fue el terremoto de los pobres. 'Desnudó nuestra fragilidad ambiental, social y económica. En Seattle un temblor de la misma intensidad sólo provocó un muerto'. Pero, a su juicio hay que huir de 'la tentación de la inmediatez' en los proyectos de reconstrucción. 'Oficialmente hay obsesión por garantizar un techo provisional, porque otro terremoto, el de las lluvias, está a la vuelta de la esquina'. Pero hay que pensar a largo plazo. 'Después del segundo seísmo, en el colmo de la ironía, el Gobierno planteó que había que modificar nuestra Ley de Medio Ambiente, porque era muy dura y podía alejar las inversiones para reconstruir'.

'Los últimos terremotos han desnudado nuestra fragilidad ambiental, social y económica'

El obispo apuesta, más allá de los préstamos y donaciones de la comunidad internacional, por la capacidad de los propios salvadoreños que viven fuera para sacar adelante al país. ' Hay un millón de compatriotas en EE UU, que cada día envían remesas por valor de tres millones de dólares'.

En cuanto a la idea de integración centroamericana -uno de los aspectos en los que se ha hecho más hincapié en la reunión de Madrid- se enfoca, según Rosa Chávez, con un criterio excesivamente economicista. Piensa, además, que hoy no hay quien inspire un proyecto regional en una zona huérfana de líderes. 'Centroamérica no tiene padres, como los tuvo Europa. ¿Quién cree en el proyecto de Centroamérica?'.