La división en el Parlamento se prolonga a la celebración del Día Mundial de la Mujer

Las representantes de estos partidos enviaron un escrito el pasado 16 de febrero a la directora de Emakunde, Txaro Arteaga, en el que pedían que este organismo hiciera pública, con motivo del día 8 de marzo, una nota de solidaridad hacia 'tantas mujeres víctimas de la violencia y el terrorismo, en ocasiones doblemente víctimas, por ser además mujeres'. Además le pedían que la solidaridad fuera activa y permanente 'hasta que acabe el terrorismo y el fascismo en Euskadi'.

Txaro Arteaga respondió, también por carta, que el Instituto Vasco de la Mujer se ocupa de la 'violencia que se ejerce en función de sexo', aclarando que la violencia de ETA no tiene lugar en función del sexo de las personas y que 'la sufren tanto los hombres como las mujeres'.

Con esa carta en la mano, la socialista Isabel Celaá, la foralista Enriqueta Benito y la popular Arantza Quiroga, en compañía de otras mujeres de sus partidos, descalificaron a la directora de Emakunde, así como el trabajo que desarrolla el instituto, y solicitaron una reforma urgente para que cumpla con la función social que tiene asignada, pero en todos los sentidos.

La portavoz socialista Isabel Celaa se preguntó por qué Emakunde se ha solidarizado con Bosnia, -aunque también eran hombres y mujeres los oprimidos-, o con las mujeres de Afganistán, y ahora no se solidariza específicamente con las mujeres vascas que 'estamos sufriendo la falta de libertad'. La parlamentaria foralista Enriqueta Benito siguió con las críticas de la diputada socialista y dijo que el Instituto de la Mujer sobra. En su opinión, habría que crear un organismo 'que de verdad nos defienda como nos merecemos'. Por su parte, la diputada del PP Arantza Quiroga explicó que la violencia de ETA comporta riesgo físico y por lo tanto una falta de libertad que también limita 'nuestra' incorporación a la toma de decisiones.

Los cargos públicos de los partidos constitucionalistas aprovecharon la ocasión y denunciaron el boicot de los nacionalistas para pactar una declaración institucional coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer. La socialista Gemma Zabaleta criticó que el Parlamento vasco no haya emitido este año una declaración institucional, coincidiendo con el 8 de marzo, al no aceptar los partidos nacionalistas la inclusión de un punto en el que se pedía solidaridad con toda las mujeres que sufren 'ataques y coacciones y ven vulnerado su derecho a la libertad'. Zabaleta advirtió de que si no rectifican, se quebrará la línea de trabajo en común en todo lo relacionado con la mujer.