Las cooperativas vascas facturaron el año pasado más de 600.000 millones

El movimiento cooperativo vasco atraviesa un momento 'excelente', que se traduce en una facturación superior a los 600.000 millones de pesetas el año pasado, un 45,5% provenientes de las exportaciones. En este ambiente de optimismo se celebró ayer en Vitoria la asamblea anual de la Federación de Cooperativas de Trabajo Asociado de Euskadi, que aglutina a 368 firmas que suman 25.863 puestos de trabajo.

El consejero de Trabajo, Sabin Intxaurraga, destacó que el cooperativo es un movimiento 'consustancial con el paisaje de este país', lo que obliga a las instituciones vascas a establecer vínculos de colaboración con él. Puso de relieve la aprobación de dos textos que han servido para adecuar este sistema de organización del trabajo a 'las necesidades actuales': la ley de Cooperativas, que ha rebajado las exigencias para formar una empresa de estas características, y la regulación de las cooperativas de iniciativa social, aprobadas en abril por el Parlamento.

Las cooperativas federadas han pasado en el último año de 350 a 368, generando 2.271 nuevos empleos. Por territorios, Guipúzcoa suma 168 firmas y un total de 18.022 empleados. Vizcaya agrupa 138 cooperativas y 6.174 trabajadores y en Álava existen 62 empresas con 1.667 puestos. Una cuarta parte de las cooperativas tienen de seis a diez empleados y casi un 5% supera los cien.

La facturación global, cifrada en 602.864 millones de pesetas, supone 16,4% más que en 1999, pero son las exportaciones las que experimentan un mayor aumento: ascendieron el ejercicio pasado a 274.295 millones, un 45,5% de la facturación total con un aumento del 24,5%.

Los responsables de las cooperativas consideran que se ha resuelto 'la injusta discriminación que padecían los socios trabajadores a tiempo parcial' gracias a un real decreto promulgado en junio pasado que reconoce la existencia de este perfil de cooperativista de jornada no completa y se le equipara al resto en materia de cotizaciones.