El Ejecutivo incumple los compromisos poselectorales

La decisión que hoy tomará el Consejo de Ministros supone el incumplimiento de sus compromisos postelectorales. Los primeros encuentros que mantuvo el presidente Aznar tras los comicios del 12 de marzo pasado tuvieron como interlocutores los líderes de CC OO, en ese momento todavía Antonio Gutiérrez, y de UGT, Cándido Méndez.

José María Aznar tenía el máximo interés en que el inicio del diálogo fuera una de sus actuaciones prioritarias tras las elecciones generales, en las que el PP obtuvo la mayoría absoluta. Hasta el punto de que tomó esa iniciativa cuando todavía era presidente en funciones y Gutiérrez en apenas 20 días iba a pasar el relevo a José María Fidalgo.

Con los dirigentes de las centrales, el presidente Aznar se comprometió a proseguir la cultura de diálogo aplicada en la anterior legislatura con el PP, que dio como resultado una decena de acuerdos con los interlocutores sociales, y a impulsar un nuevo proceso en el que aseguró que iba a respetar su autonomía y no iba a tomar medidas unilaterales e impuestas.

Esas afirmaciones, trasladadas por los dirigentes sindicales, fueron confirmadas por el entonces ministro Portavoz, Josep Piqué, quien ratificó tras una reunión de Aznar con los sindicatos: 'El Ejecutivo no va a imponer una reforma del mercado de trabajo que no esté consensuada mínimamente por los agentes sociales'.

Asimismo, Aznar comunicó a las centrales que él personalmente se corresponsabilizaba del éxito del diálogo, y aseguró que cuando hubiera dificultades convocaría a UGT, CC OO y la patronal para analizar los problemas y ver la manera de evitarlos.