_
_
_
_

El cantautor Pedro Guerra edita un cuarto álbum lleno de evocaciones viajeras

El disco está inspirado en músicas y ambientes de varios países latinoamericanos

Ofrenda remite más que nunca a la intención viajera de Pedro Guerra, siempre en contacto con la música de las dos orillas del Atlántico. 'Surge de un viaje nada premeditado a México', señala. 'Me quedé unos días de vacaciones y coincidía con el 1 de noviembre. Pasé allí el Día de los Muertos y viví esa fiesta, los altares, las ofrendas... Me traje esa sensación. También estuve en Patagonia y en Tierra de Fuego. Son cosas que ves, fotografías que te quedan'.

Algunas instantáneas de esos viajes han servido para componer una de las piezas más emocionantes del disco, el tema Niños cantado a dúo con la mexicana Julieta Venegas. La canción, según su autor, 'nace el año 1994 cuando, estando en Brasil, tengo mi primer encontronazo con la infancia en la calle. En España no es algo que se vea tanto y, de repente, llego a una ciudad donde hay muchísimos niños por la calle, siempre rondando los ambientes turísticos, que es donde pueden pillar algo. Allí empecé a escribirla pero se quedó años metida en un cajón. Hace poco la rescaté y se me había juntado con otras fotos similares de México y de Colombia. Decidí retomarla, reflejando tres escenarios de una infancia en desastre total: niños por la calle, como refleja la película colombiana La vendedora de rosas, todo el día esnifando pegamento'.

El tema tiene cierto aire brasileño, como también lo tiene Miedo: 'Tenía la idea de escribir una canción acerca del miedo y sus muy diferentes formas. Normalmente identificamos el miedo con un terror hacia lo irreal. Pero hay un miedo absolutamente real que se manifiesta de muchas maneras y supone un bloqueo continuo para nuestra realización personal. En esta canción voy enumerando todos los miedos'.

En el álbum, en el que también colaboran los vocalistas brasileños Lenine y Daniela Mercury, hay otra sentida dedicatoria musical al padre del artista, llamada Papá cantó: 'Por un lado es un homenaje a mi padre, porque muchas canciones las aprendí porque se las escuché a él: Tonada de un viejo amor, de Eduardo Falú, o El día que me quieras... En aquella época la metíamos toda en un saco al que llamábamos música suramericana. También es un homenaje a esas canciones y, al mismo tiempo, una reflexión sobre mi carrera, sobre todo lo que me ha pasado'.

Las palabras cantadas

Pese a las servidumbres de una sociedad cibernética, Pedro Guerra, que a mediados de los noventa emergía en medio de una fiebre de nuevos cantautores, mantiene la vigencia actual de la palabra cantada: 'Todo es virtual, pero no se pierde nunca nada. Un amigo mío decía que en una época se pensó que el cine iba a desaparecer a causa del vídeo y no había sido así. La palabra cantada sigue teniendo un espacio de comunicación importante que yo no creo que se vaya a perder'. No obstante la naturalidad de su sonido -'no lo busco así, pero siempre acaba sonando humano'-, Pedro Guerra revela que la tecnología de las máquinas en música también reclama su hálito humano: 'Una vez escuché decir a Björk que es mentira que las máquinas no tengan alma. Tienen el alma de la de las personas que las manejan'. Es esa misma sensación de humanidad la que le hace preferir 'la manera de cantar latina o brasileña que la anglosajona'.

Pedro Guerra, el pasado viernes en Madrid.
Pedro Guerra, el pasado viernes en Madrid.LUIS MAGÁN

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_