El regreso de un 'comando'
El de ayer es el quinto atentado en Madrid desde que ETA rompió la tregua, el 3 de diciembre de 1999, aunque perpetró el primer atentado mortal el 21 de enero de 2000 en la capital española con el método del coche bomba: falleció el teniente coronel Pedro Antonio Blanco. En todos se ha utilizado este sistema. El último, hace tres meses y 13 días, costó la vida al magistrado del Tribunal Supremo y general de la Armada José Francisco Querol Lombardero, y a otras tres personas: su chófer, Armando Medina, su escolta, Jesús Escudero García, y Jesús Sánchez Martínez, el conductor de un autobús de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) que pasaba por allí y murió algunos días después como consecuencia de las graves heridas provocadas por la metralla que se incrustó en su cuerpo.
Los investigadores de la lucha antiterrorista creen que los etarras que actuaron ayer son los mismos miembros del comando Madrid que mataron al magistrado Querol el 30 de octubre de 2000 en la avenida de Badajoz. La banda introdujo entonces a un relevo de este comando, pero la policía lo desactivó al detener, el 7 de noviembre de 2000, a Ainara Esteran Cruz y Nerea Garro Pérez.
Los antiguos miembros del comando Madrid esperaron un tiempo, y ahora han vuelto a actuar, según fuentes de la lucha antiterrorista.
El comando Madrid, al que se le atribuye este último atentado, utilizó ayer para huir un coche que fue robado el 1 de septiembre, antes del atentado al magistrado Querol. La policía, mientras tanto, reconoce que aún no ha conseguido debilitar la infraestructura que los terroristas utilizan en la capital desde que rompieron la tregua.
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