_
_
_
_

Un hombre denunciado por amenazas estrangula a su mujer y después se ahorca

Un hombre de 61 años estranguló el pasado jueves a su mujer, con la que no convivía desde que ésta iniciara los trámites de separación, y después se suicidó colgándose de una viga. Este episodio de violencia doméstica ocurrió en Cervelló, un pueblo situado a pocos kilómetros de Barcelona. La víctima había denunciado al homicida por amenazas hace más de un año y medio y en 1997 la Policía Local había intervenido por una discusión de la pareja, informa Efe.

Las circunstancias que acabaron con la muerte de Rosario Pacheco, de 59 años, aún están por determinarse, a la espera de los resultados que ofrezca la autopsia. No obstante, según el primer informe forense, el homicidio se produjo a primeras horas de la mañana del jueves. Las investigaciones de la Guardia Civil, basadas en los interrogatorios efectuados a los vecinos del matrimonio, señalan que el parricida, Antonio Raya, de 61 años, regresó el pasado miércoles por la noche de Córdoba, ciudad en la que había fijado su residencia tras la separación.

Todo apunta a que el matrimonio inició una violenta discusión, que el marido concluyó expeditivamente la mañana del jueves estrangulando a su mujer con una cuerda. Posteriormente, el parricida colgó esa misma cuerda en una viga de hierro del techo, rodeó con ella su propio cuello y se ahorcó. Los dos cadáveres se encontraban en el garaje de la vivienda, una casa de dos plantas situada en la urbanización Can Pi, que había sido habilitado como dormitorio.

Los cuerpos fueron descubiertos por un vecino que había acudido a la casa a efectuar un pago. Esta persona fue quien avisó a la Policía Local de Cervelló. Otro vecino aseguró que poco antes de las diez de la mañana del pasado jueves, el parricida había acudido a su domicilio y le había dicho que avisara a la Guardia Civil. Después de estas enigmáticas palabras volvió a su casa. Sin embargo, el vecino asegura que no le hizo caso y no telefoneó al cuartel más cercano del instituto armado.

El matrimonio tenía tres hijos, dos hombres y una mujer. El pequeño, de 30 años y disminuido, vivía con su madre y los otros ya no viven en el domicilio familiar.

Un juzgado de Sant Feliu de Llobregat se ha hecho cargo del caso. Este nuevo episodio de violencia doméstica ha tenido como escenario una pequeña población barcelonesa muy cercana a la otra, Corbera de Llobregat, en la que hace tan sólo unos días otro hombre asesinó a su mujer y después dejó el cuerpo envuelto en unos sacos de basura en la cuneta de una carretera. También en la comarca del Baix de Llobregat, en la localidad de Esplugues, hace apenas dos semanas, un joven de 20 años asesinó de un tiro por la espalda a su compañero sentimental y luego se suicidó con la misma pistola.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_