'El proyecto no es sólo 'marketing' y moda'

La Bienal de Valencia es uno de los proyectos culturales más ambiciosos de la Generalitat valenciana, presidida por Eduardo Zaplana, del PP. Entre los meses de junio y octubre convocará a más de 150 artistas de múltiples procedencias y disciplinas. Pero el elevado coste de de la iniciativa, 900 millones de pesetas, y su planteamiento han suscitado una creciente polémica. Hace unos días, Eduardo Arroyo calificó el proyecto de 'cultura de escaparate' hecha por especialistas en 'marketing y moda' y criticó a su promotora política, la subsecretaria de Cultura, Consuelo Ciscar. El director de la Bienal, el italiano Luigi Settembrini, con una dilatada experiencia en exposiciones internacionales de moda, sostiene que el arte debe enfrentarse con otros lenguajes y subraya que el objetivo principal es difundir la imagen de Valencia en el mundo.

Pregunta. ¿En qué consiste la Bienal de Valencia?

Respuesta. Trata sobre la comunicación entre las artes. Hoy el arte, la moda o el diseño ocupan el mismo ámbito, el de la novedad y la comunicación. No creemos en la autorreferencialidad del arte hoy. No estamos en el siglo XVI. El arte necesita confrontarse con otros lenguajes. La moda no es arte, pero es un lenguaje importante que vende imagen en todo el mundo. El artista ha de saber qué hace Armani. La Bienal tendrá ocho espacios distintos dispersos por la ciudad.

P. ¿Cómo surgió el proyecto?

R. Fue un encargo de la Generalitat. Valencia me sorprendió ya hace diez años por la belleza de sus lugares y monumentos, y por su vitalidad.

P. ¿Quiénes serán los principales artistas?

R. Hasta el 24 de abril no daremos la lista defintiva. Son más de 150, entre los que se encuentran los nombres ya conocidos de Peter Greenaway, Emir Kusturica, Robert Wilson, Shiro Takatani, y de críticos como Achille Bonito Oliva.

P. ¿Prima más el marketing o la competencia cultural?

R. No tengo vergüenza de ser considerado un importante experto de marketing. No es un delito. He hecho muchos proyectos, no sólo de moda, siempre de marketing cultural, y puedo decir, aunque es un poco vulgar, que los proyectos de mi equipo generalmente tienen un gran éxito. Tenemos importantes objetivos culturales, pero el objeto principal es la comunicación sobre Valencia. Tiene que devenir para el mundo como una ciudad inteligente, moderna e informada. Vamos a hacer la campaña de publicidad más grande que se ha hecho sobre Valencia como capital de la cultura contemporánea. El objeto es obtener no menos de 800 millones de contactos directos en todo el mundo, sólo a través de la prensa, sin hablar de Internet y televisiones. A través de este evento se obtiene una inversión sobre la ciudad que influye y beneficia a su imagen, a su comercio, a sus ferias internacionales. Estamos creando una estructura con profesionales valencianos. Mi equipo está compuesto sólo por tres italianos y yo.

P. ¿Son necesarios los 900 millones previstos?

R. La gente y los periodistas se preocupan mucho por la cantidad de dinero y no por la calidad. Se hace mucha demagogia sin pensar que si haces una cosa con un millón de pesetas sin éxito es peor.

P. Cuenta con el triple de presupuesto que la Trienal de Barcelona, que se celebra este año.

R. La Bienal de Venecia cuesta 3.000 millones; Kassel, 1.500 millones. Éstas son las dos manifestaciones con las que Valencia quiere competir. Si decides competir en Fórmula 1, donde están Ferrari o McLaren, necesitarás un coche como éstos. Además, creo que la captación de patrocinios está yendo muy bien. Es curioso el caso de Valencia. ¿Por qué se critica tanto un proyecto que intenta vender a Valencia? Cuando se estaba haciendo el IVAM, hoy uno de los mejores museos del mundo, se suscitó una tremenda polémica, al igual que con el Palau de la Música....

P. También desde fuera de Valencia ha habido críticas, como las de Eduardo Arroyo...

R. Después de conocer bien el proyecto, no me podría decir que es sólo marketing y moda. Tengo mucho respeto por él. Pero también es verdad que no ha sido invitado. Parece, además, que a Arroyo no le gusta ninguno, ni Calatrava, ni Wilson, ni Armani... Si no le gusta Settembrini, estoy en muy buena compañía.

P. Desde algunos sectores se insiste en que la Generalitat paga a prestigiosos artistas por el impacto mediático. Éstos cobran una millonada y se van...

R. Hemos presentado a las universidades un proyecto de participación de artistas de la Bienal en cursos de posgrado. Es una labor fundamental. Es importante el impacto cada dos años de estos artistas en los estudiantes.