Mas anuncia a cargos de CDC la retirada del proyecto de Enron

La oposición al proyecto de Enron, al Plan Hidrológico Nacional (PHN) y al Mapa Eólico convocó el domingo a 25.000 personas en Móra d'Ebre, la mayor manifestación nunca vista en la zona. Las tres comarcas que suscribían la convocatoria suman poco más de 50.000 habitantes, lo que da idea de la fuerte oposición que estos tres proyectos han levantado en las llamadas Tierras del Ebro.

El conseller en cap del Gobierno catalán ha reaccionado con rapidez. Unos días antes de la manifestación anunció una moratoria de dos meses antes de tomar una decisión definitiva para estudiar el proyecto. El domingo por la tarde, sin embargo, vista la magnitud de la manifestación, anunció a los militantes de su partido, preocupados por las repercusiones que estos proyectos pueden tener para Convergència, que el proyecto de Enron no se realizará.

Mas estuvo debatiendo con los cargos electos de CDC en las comarcas del Ebro el modo de llevar a cabo el debate ya anunciado sobre el modelo de crecimiento económico en estas comarcas. 'Está ya bendecido', aseguran fuentes convergentes en la zona. Enron no sólo paraliza su proyecto, sino que se retira. Algunas de estas fuentes indican que en un plazo de no más de 20 días se anunciará oficialmente la retirada del proyecto.

El movimiento de oposición a la térmica que ha reunido a multitud de entidades y organismos de las comarcas de la Ribera d'Ebre, la Terra Alta y el Priorat es muy parecido al que levantó en la Conca de Barberà el plan de residuos que el Gobierno de CiU intentó aplicar hace 11 años, cuyo resultado fue el hundimiento electoral de los nacionalistas en la comarca, del que no han empezado a reponerse hasta ahora.

Críticas a Felip Puig

Demasiado riesgo como para que el proyecto de Enron se mantenga. Además, el movimiento opositor a Enron tiene los mismos protagonistas que dieron al traste con los planteamientos del Gobierno de Pujol en la Conca de Barberà. Los dirigentes locales de CDC comienzan a acusar el rechazo que han provocado los tres planes de infraestructuras, que los están dejando en evidencia frente a un electorado que hasta ahora les ha dado el dominio de los mayores municipios de las comarcas del Ebro.

Los cargos convergentes tampoco ocultan sus críticas a la gestión del consejero de Medio Ambiente, Felip Puig, a quien culpan de haber permitido que CDC se convierta en blanco de todas las críticas en un proyecto, el Plan Hidrológico Nacional, 'que es responsabilidad del Gobierno del PP'. La tibieza de Puig a la hora de presentar alegaciones al plan ha perjudicado seriamente a la imagen del partido.

En una reunión privada e informal con los dirigentes locales y comarcales del partido, Artur Mas trató también de la organización del debate que anunció el pasado sábado con las fuerzas sociales y líderes de las plataformas ciudadanas sobre el modelo de crecimiento económico de la zona. En los próximos días se celebrará una amplia reunión, 'de carácter muy institucional', a la que se convocará tanto a los opositores a los proyectos más polémicos como a los representantes municipales y de cooperativas agrarias, sindicatos, cofradías de pescadores y entidades ecologistas, entre otros, para finalmente establecer una serie de comisiones de trabajo.

La coincidencia de tres grandes y polémicos proyectos han despertado gran oposición en cinco de las 10 comarcas de la provincia de Tarragona (Montsià, Ribera d'Ebre, Baix Ebre, Terra Alta y Priorat), que los ven como 'una agresión al territorio'. Las mismas organizaciones que convocaron la manifestación del domingo en Móra d'Ebre tienen prevista otra en Barcelona para el próximo día 25.