'Invenciones urbanas' descubre la opinión de García Hortelano sobre grandes autores

Invenciones urbanas, una recopilación de artículos y entrevistas del escritor madrileño Juan García Hortelano (1928-1992) publicados en el extranjero desde los años sesenta hasta su muerte, recoge la evolución de su pensamiento sobre 'autores que consideraba fundamentales' como Vasco Pratolini, Franz Kafka o Marcel Proust. Pero el texto presenta también, según señaló ayer en Valladolid la hija de García Hortelano, Sofía, 'la esencia literaria y las arraigadas convicciones que con el paso del tiempo determinan una obra con más profundidad y en constante evolución', como la de su padre.

La editorial vallisoletana Cuatro Ediciones presentó ayer en la capital castellana este libro, realizado por Mauricio Jalón, que recoge en su primera parte una serie de artículos que tratan sobre autores como Proust, Céline, Kafka, Walser o los aires italianos de posguerra con Italo Calvino, Vasco Pratolini o Cesare Pavese. En la segunda mitad de la obra el protagonismo pasa a centrarse en las reflexiones y artículos sobre escritores españoles de primerísima fila como Cervantes o Clarín.

Pero, sobre todo, Invenciones urbanas incluye un buen número de entrevistas publicadas en París, Caracas, Lisboa o Funchal que iluminan el espacio literario de García Hortelano. Queda patente de este modo que la obra del escritor madrileño no se reduce sólo a sus grandes novelas como Nuevas amistades, Tormenta de verano, El gran momento de Mary Tribune, Los vaqueros en el pozo o Gramática Parda, el libro fundamental de García Hortelano. Su hija comentó que en esta última novela se materializa esa absoluta unión de lo que son las cuestiones formales con los aspectos de fondo. 'La reflexión, la acción y la narración que era el eje fundamental de todas sus novelas', explicó su hija.

Cuando Juan Benet escribió que García Hortelano era 'el hombre más grato que España ha dado en el siglo', el autor madrileño, ganador de los premios Biblioteca Breve (1959) o Formentor (1961), ya había conseguido trascender nuestras fronteras en un momento político muy gris por la presión de la dictadura franquista. Frente a una idea de la literatura basada en el realismo socialista de los años cincuenta y sesenta y 'con una tendencia a disociar el fondo de la forma', podemos ver a lo largo de esta edición cómo García Hortelano va concibiendo la literatura 'como la propia unión del fondo y de la forma, algo que no se puede disolver y que está absolutamente unido', relató Sofía durante la presentación de este nuevo volumen de la editorial Cuatro Ediciones, que también ha publicado otras obras de amigos íntimos del ganador del Premio de la Critica en 1982 con Gramática Parda, como Barral o Juan Benet.

Invenciones urbanas es un libro recopilado a partir de 'pequeños y viejos papeles amarillentos y de páginas de antiguas entrevistas' con el que 'el buen charlatán y mejor lector Juan García Hortelano estaría encantado', según su viuda, María Martín-Ampudia, que definió a su marido como una persona 'ingeniosa, divertida e insertada en su tiempo y siempre rodeada de gente joven y excelentes amigos'.

Frases, manifestaciones, opiniones bastante significativas de su forma de pensar y de sus preocupaciones sobre lo que estaba escribiendo o de las cosas que sucedían completan Invenciones urbanas, 'un libro distinto' en el que subyace su convicción de que 'el único buen gusto respetable es el del hombre libre que calla sus preferencias, aguanta las ajenas y disfruta en la clandestinidad'. Según María Martín-Ampudia, 'no es una novela, no son unos relatos, no es un libro de crítica, no es un libro de artículos'. En palabras de la viuda, 'es un libro en el que una persona que le tiene mucho amor a la literatura y que además era amigo de García Hortelano, como es Mauricio Jalón, ha investigado con una sagacidad y un tesón enormes y ha conseguido sacar aquellos trozos absolutamente expresivos de su opinión y de lo que opinaba de su tiempo y sobre la literatura en general'.