Mas abre de nuevo consultas para lograr una propuesta común sobre financiación autonómica

Las expectativas de que las negociaciones para la revisión del sistema de financiación autonómica sean muy difíciles han movido a Convergència Democràtica (CDC) a buscar de nuevo el apoyo de los demás partidos catalanes. El secretario general de CDC, Artur Mas, anunció ayer que abrirá esta semana una nueva ronda de consultas con todos los partidos con la pretensión de lograr una propuesta unitaria. La dirección de CDC abordó ayer esta cuestión en su primera reunión tras las vacaciones. Mas dijo que ERC es el partido con el que es más difícil el acuerdo. Pero ERC acordó ayer mismo hacer un gesto de 'pragmatismo responsable' para lograr una posición común.

La ronda de consultas anunciada ayer por Mas para esta semana y la próxima será la tercera que emprende el consejero de Economía del Gobierno catalán con el objetivo de lograr una 'propuesta catalana' en materia de financiación autonómica, tal como le reclama el líder de la oposición socialista, Pasqual Maragall. Sin embargo, los tres intentos han terminado sin acuerdo.

En las anteriores revisiones de la financiación autonómica, CiU y el Gobierno de Pujol desdeñaron el apoyo de los demás partidos catalanes. Creyeron siempre que les bastaba con la función de bisagra que tenían sus diputados en las Cortes. Pero la mayoría absoluta de que dispone el Gobierno de Aznar ha reducido a cero este factor. Por esta razón, Mas dijo que el Gobierno está dispuesto a un 'último intento' en la búsqueda de una posición unitaria. Aunque sea, dijo, al precio de 'sacrificar planteamientos y ambiciones propias'.

También la dirección de ERC se mostró ayer dispuesta a facilitar el acuerdo entre las fuerzas catalanas en un asunto que su secretario general, Josep Lluís Carod, consideró 'el más importante' para el futuro del autogobierno.

ERC seguirá defendiendo su propuesta de concierto económico, dijo Carod, pero es consciente de que no la suscribe ningún otro partido y está dispuesta a aceptar 'propuestas de mínimos' si esto ha de llevar a una posición unitaria de todas las fuerzas catalanas.

Carod especificó las condiciones mínimas que ERC defenderá en todo caso: bilateralidad en la negociación entre la Generalitat y el Gobierno central, y que la financiación autonómica se ajuste a lo previsto en el Estatuto de Autonomía, cuyo artículo 45 dice, entre otras cosas, que la financiación de la Generalitat responderá al promedio de los coeficientes de población y esfuerzo fiscal.

Escepticismo

El objetivo económico mínimo debiera ser, adelantó Carod, reducir una tercera parte del déficit fiscal. Eso significa, aproximadamente, un incremento de la financiación actual de medio billón de pesetas.

Pese a la disposición de CDC y ERC a rebajar sus respectivos planteamientos, el acuerdo entre los partidos catalanes no es fácil. Carod trazó ayer un panorama bastante pesimista. Convergència tiene un mal método negociador, consistente en situarse de entrada 'bajo mínimos'. Del PSC, dijo, les separa la pretensión de éstos de que los municipios reciban fondos directamente de la Administración central, mientras que ERC sostiene que todo tiene que pasar por la Generalitat. Del PP destacó que 'niega la bilateralidad' en las negociaciones para la financiación autonómica.

Ahora que ya no están en el Gobierno central, los socialistas propugnan también un acuerdo de todas las fuerzas catalanas a la hora de negociar la financiación autonómica. Pero creen que difícilmente se logrará si CiU sigue ligada al PP en el Parlament. Antoni Castells, responsable de economía del PSC, acogió ayer positivamente los anuncios de Mas y Carod. Cuando Cataluña concurre a una negociación de este tipo con una posición unitaria, dijo Castells, 'redobla su peso y se convierte en un punto de referencia inevitable'.