Los árboles de San Lorenzo de El Escorial
Por fin le ha llegado el turno al gran árbol, al majestuoso, espléndido y entrañable cedro de cerca de 200 años y 30 metros de altura, y después, a los otros dos más pequeños, como antes les sucedió a los olivos, a los fresnos, las hayas, las palmeras... Y también podríamos decir a las ardillas, que, de paso, han perdido uno de sus hábitats. Queda el pinsapo, que van a rodear bien de cemento para que respire mejor...Hace dos años les tocó a los hermosos castaños de Indias que rodeaban al monasterio sin saber muy bien por qué, o a los pinos quemados en Abantos sin saber tampoco muy bien cómo, y a los que rodean la Horizontal para que gente principal -por su dinero- se hiciera un chalé.
Esta vez han desertizado Torre Alta porque la Comunidad de Madrid quiere construir un teatro para la cultura. ¿Qué cultura será ésta que se inicia con una barbarie así, con semejante salvajada? ¿En qué país un poco civilizado se puede talar un árbol tan escaso y tan hermoso? Pues en San Lorenzo de El Escorial se ha hecho, y con el permiso y bendiciones del propio Ayuntamiento.- Santiago Mancho.
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