Los juzgados de Valencia registraron en el año 2000 409 denuncias por delitos de violencia familiar

El Servicio de Violencia Doméstica (VIDA), creado en 1999 por el Decanato de los Juzgados de Valencia, ha registrado en los diez primeros meses de este año 409 asuntos relacionados con la violencia doméstica. Una cifra inferior a la de todo el año 1999, en el que se registraron 696 denuncias, o la de 1998 en que se efectuaron 629. Según el gabinete de prensa de la Audiencia de Valencia, las estadísticas de los últimos cuatro años ponen de manifiesto que de los 1.836 delitos denunciados, los de lesiones, 521 casos, suponen el 28% del total; los de amenazas, 330 denuncias, un 28%, mientras que 162 denuncias fueron hechas por malos tratos, lo que equivale a un 9% del total de denuncias.

Asimismo, durante el último cuatrienio se ha registrado un homicidio y un asesinato como consecuencia de situaciones de violencia familiar. Cifras la de este año algo inferiores a las de 1999, en el que las denuncias por lesiones y agresiones significaron un 48% del total de los casos, mientras que un 29% correspondieron a las amenazas y un 12% a los malos tratos.

La mayoría de los datos recogidos en el Servicio de Violencia Doméstica este año proceden de los juzgados de instrucción números 9 (192 casos); 10 (88 casos); 4 (85 casos); 14 (83 casos); 15 (83 casos); 6 (76 casos); 13 (74 casos) y 1 (72 casos).

Por meses, es septiembre la época del año en que se han presentado mayor número de denuncias, 73 en total, frente a las 14 del mes de enero. Además, este año se aprecia un importante aumento de los asuntos de violencia doméstica registrados en el mes de febrero que, aunque númericamente han sido 30, suponen un nivel de incremento del 114% respecto al año anterior. En sentido contrario, durante el mes de octubre, con 46 asuntos denunciados, se produjo un descenso del 73% frente a los datos arrojados durante 1999.

El servicio VIDA pretende contribuir a la erradicación de los delitos englobados en el epígrafe de "violencia familiar" y cuyas víctimas son fundamentalmente mujeres y niños. Según el gabinete de prensa de la Audiencia de Valencia, con la información que suministra este registro los jueces pueden adoptar resoluciones más ajustadas para cada caso concreto. Los magistrados disponen a través de este registro de datos precisos sobre la peligrosidad real y potencial del agresor, y pueden saber si ejerce habitualmente violencia en su entorno familiar. Un dato básico para atajar el problema ya que la concentración de las denuncias de un mismo agresor en un juzgado permite determinar su habitualidad y por tanto dictaminar judicialmente de forma más ajustada. No en vano, en Valencia, y en buena parte gracias a la información recopilada, los jueces ya han podido dictaminar varias órdenes de prisión para agresores que incumplían de forma sistemática las órdenes de alejamiento del entorno familiar.

Los delitos por malos tratos en el ámbito familiar han preocupado de manera muy especial a la judicatura valenciana. Tanto es así, que los únicos juzgados especializados en toda España en delitos referidos a violencia doméstica se ubican en Orihuela, Elche y Alicante.

A pesar de la labor de magistrados y de diferentes organismos públicos, los delitos de violencia doméstica continúan siendo cometidos en la mayoría de los casos en el anonimato. Estudios realizados por diferentes organizaciones coinciden en señalar que sólo entre un 5% y un 10% de los delitos de esta clase llegan a ser denunciados.