La Sindicatura cuestiona las contrataciones en CACSA
Obras de mejora
El informe de la Sindicatura de Comptes correspondiente al ejercicio de 1999 sobre las cuentas de la empresa Ciudad de las Artes y de las Ciencias, SA (CACSA), cuestiona los sistemas de contratación utilizados por la empresa pública, tal como ya sucediera en el ejercicio precedente. "Se deberán tomar las medidas necesarias tendentes a mejorar los aspectos que se han puesto de manifiesto como consecuencia de la revisión llevada a cabo sobre los procedimientos de contratación", señala en sus conclusiones y recomendaciones el informe que el Síndic de Comptes, José Antonio Noguera de Roig, presentó el pasado viernes en las Cortes Valencianas.Al analizar los expedientes licitados por el procedimiento negociado sin publicidad por razones distintas de la cuantía, el informe señala que "en ninguno" de ellos se ha encontrado "justificación, mediante el oportuno informe técnico, de la no conveniencia de realizar la concurrencia de ofertas, o que la empresa adjudicataria del contrato sea la única capaz de prestar el servicio". La crítica es más severa con respecto a los expedientes licitados por procedimiento negociado sin publicidad y contratos menores. De los 10 expedientes analizados, en seis de ellos "se supera el importe máximo fijado" para contratar los suministros o servicios mediante este sistema. "En estos casos la entidad debió proceder a cumplir con los requisitos de publicidad y concurrencia convocando los correspondientes concursos o procedimientos negociados con publicidad", señala el informe. Y añade que "por razón de la cuantía, solamente en un caso es posible acudir a la figura del contrato menor", que "en cinco expedientes no consta que se haya efectuado consulta o solicitud de ofertas a varias empresas capacitadas con el fin de seleccionar la más adecuada, ni se justifica la no concurrencia", y que "solamente en dos de los expedientes revisados se ha suscrito el correspondiente contrato", aunque en los mismos "no existe constancia de la documentación acreditativa de la personalidad o solvencia del adjudicatario, ni se acredita el cumplimiento de sus obligaciones tributarias y con la Seguridad Social".
En base a todo ello, la diputada socialista María Antonia Armengol criticó ayer la gestión de esta empresa pública, cuyos gestores, dijo, "hacen lo que les da la gana" en este sentido. La diputada también destacó un dato que refleja el Síndic respecto a l'Hemifèric, que, a pesar de que inició su actividad en 1998, en el ejercicio de 1999 llevó a cabo obras de mejora por valor de 883 millones de pesetas, entre otras, el proyecto complementario de protección contra incendios, el de generación eléctrica y el de instalaciones mecánicas y climatización.
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