El 46% de los artículos de 140 tiendas 'todo a cien' son irregulares

Sólo una mínima parte de los juguetes carecen de anomalías

Madrid - 17 dic 2000 - 00:00CET

Los resultados de la inspección realizada por los servicios técnicos de la Consejería de Economía en las denominadas tiendas de todo a cien son demoledores. El 46% de los 250 productos inspeccionados en 140 tiendas de la región durante una campaña realizada entre marzo y abril de este año presentaron irregularidades en su etiquetado o carecían del necesario certificado de la Unión Europea que demuestra su seguridad.Las mayores deficiencias se hallaron en los productos relacionados con el material eléctrico (el 77% de los examinados), seguidos de los juguetes (23%). Los artículos en los que se descubrieron las más importantes irregularidades fueron muñecos de goma, naves espaciales, teléfonos de juguete, sillas de paseo, pelotas, instrumentos musicales, coches, juegos de mesa y prolongadores eléctricos y enchufes.

Los inspectores de la Consejería de Economía consideran que estos resultados pueden "estar relacionados con el origen de los productos controlados", ya que los propietarios de estas tiendas de todo a cien adquieren estas mercancías a mayoristas que "importan directamente de terceros países un gran volumen de productos sin incluir sus datos en el etiquetado".

El informe destaca igualmente que, en el caso de los juguetes, sólo el 10% de los artículos examinados no presentó "ninguna irregularidad".

En la inspección se advirtió que el 7% de los juguetes carecían del marcado de la UE. Los más afectados son los muñecos de goma con silbato y las máquinas recreativas infantiles. El 16% se vendían sin indicar el nombre o razón social del fabricante y el 21% no señalaba su domicilio. "Esta información", dicen los inspectores, "es importante de cara a determinar el origen del juguete en caso necesario, y teniendo en cuenta las dificultades que se vienen encontrando en este tipo de establecimientos para mostrar la acreditación documental del origen de los productos".

El 7% de los juguetes no indicaba su denominación en español y el 7,7% presentaba irregularidades relativas a las instrucciones de uso y manejo, que afectan en su mayoría al idioma. Igualmente, el 9% no contenía instrucciones sobre la seguridad del producto, o bien, si figuraban, no estaban en español.

Halladas pistolas de imitación en tiendas de 'todo a cien'

La mayor parte de los artículos a los que les afectaba esta irregularidad eran muñequitos de goma con silbato. "Estos juguetes", dicen las actas de inspección, "vienen planteando problemas de seguridad por motivos mecánicos, debido al desprendimiento de dicho silbato".Los productos eléctricos no ofrecieron mejores resultados. El 31% no presentaba el marcado de la UE. El 40% carecía del nombre del fabricante, y el 74%, de su domicilio. Tres de cada diez no llevaban instrucciones de seguridad y uno de cada diez no las tenía en español.

En la campaña de inspección también se hallaron productos que imitaban armas de fuego. En concreto, los inspectores hallaron dos armas blancas (navajas) a la venta, "que fueron retiradas de forma inmediata en el curso de la vista". En otro establecimiento se encontraron tres pistolas de aire comprimido, que pasaron directamente al Servicio de Intervención de Armas de la Guardia Civil.

Según el informe, se puede hablar de "baja incidencia" en cuanto al número de armas e imitaciones de armas decomisadas. "Esta baja incidencia puede estar relacionada con el control continuo que hace la Guardia Civil sobre tiendas de todo a cien y jugueterías, además de armerías", se señala.

En otra tienda de todo a cien se encontró una imitación de arma de fuego, "que por sus características externas puede inducir a error sobre su auténtica naturaleza", si bien es libre su comercialización. Los inspectores recuerdan que este tipo de juguetes sólo puede ser adquirido por coleccionistas, y que los compradores deben presentar una autorización especial.

También se retiraron 750 unidades de un producto prohibido. Se trata de un juguete que aumenta su volumen al entrar en contacto con el agua. Los niños corren peligro de ahogarse si se meten el juguete en la boca y éste engorda con la saliva. Los artículos fueron hallados en Madrid, Tres Cantos, Galapagar, Mejorada, San Fernando, San Sebastián, Leganés, Rivas, Móstoles, Getafe y San Lorenzo.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya

Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.