Un director de banco dice que el ex edil de Getafe tenía "inversiones opacas"

Enrique C., director de la sucursal de Caja de Madrid en la que el ex edil de Obras de Getafe, el socialista José Antonio Serrano, invirtió dinero en fondos, aseguró ayer en la Audiencia de Madrid que el propio concejal le dijo que tenía dinero ahorrado y quería invertirlo "de forma que no llamase mucho la atención". "Es lo que nosotros llamamos una inversión opaca o semiopaca", señaló. "El señor Serrano acudió al banco junto con [el constructor] Álvarez Arana y las esposas de ambos, pero los papeles para el fondo de inversiones a nombre de la esposa del ex concejal se rellenaron en el despacho, donde tan sólo estábamos los hombres", explicó. Serrano y el constructor Enrique Álvarez Arana están acusados de cohecho.El empresario, que se enfrenta a 18 años de cárcel por corrupción y por un delito de falsedad, ha declarado que pagó comisiones al ex concejal, que se enfrenta a ocho años, a cambio de obtener obras del Ayuntamiento. Serrano lo ha negado todo y afirma que se trata de un "montaje" de sus adversarios políticos.

El director de la sucursal de Caja de Madrid agregó al tribunal que fue él quien descubrió que, durante el año 1993, Álvarez Arana consiguió cerca de 110 millones de pesetas a través de la falsificación de certificaciones de obras ya cobradas, confeccionando 16 letras de cambio por un valor conjunto de 15.212.000 pesetas, según el fiscal. "Cuando lo descubrí hablé con los empleados de la empresa Praper y con los del Ayuntamiento, y la interventora del Consistorio fue quien me confirmó que las firmas de las letras de cambio no eran las mismas que las que se ponían allí", añadió, informa Europa Pres.

El fiscal afirma que Serrano expuso en 1989 a Álvarez Arana la posibilidad de otorgarle adjudicaciones de obras municipales a cambio de una comisión por cada trabajo realizado. Así, entre los años 1989 y 1993, las empresas adjudicatarias de 25 obras fueron las vinculadas a Álvarez Arana, aunque estaban a nombre de familiares suyos. El importe de estos trabajos ascendió a 195 millones de pesetas.