Brian Yuzna adaptará su 'Fausto' a la censura de otros países y a la televisión

Brian Yuzna no da por concluido su trabajo de dirección de Fausto. El amor de los condenados, la primera producción de la Fantastic Factory, que logró en Sitges el premio a los mejores efectos especiales. Ayer, durante la presentación del filme en la 11ª Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, anunció que realizará versiones poco menos que a la carta. "Es necesario acomodarse a la censura de cada país y a la televisión", dijo, "para que las películas puedan verse antes de la medianoche".

Fausto. El amor de los condenados, inspirada en la serie de cómics de Rebel Studios, se estrenará en las salas a principios de 2001. La película recupera el mito de Fausto, un hombre que vende su alma al Diablo. Sólo el argumento ya anuncia que se trata de una película satánica muy violenta. Es además un filme cargado de escenas de sexo y de espectaculares efectos especiales. La versión que se mostró en Sitges y en la pantalla del Principal de San Sebastián no será la única. "Todavía", reconoció ayer Yuzna, "estamos mejorando la película. Era muy importante para nosotros presentarla en estos festivales. Pero queda mucho por hacer. Para distribuirla en Estados Unidos, por ejemplo, hay que cortarla. En el mundo cada país tiene su censura y hay que acomodarse a todo. En España tenemos la ventaja de que el mercado es muy abierto, aquí se acepta casi todo".

Yuzna rodó Fausto en Barcelona, en inglés y con un equipo nacional e internacional. Recreó allí un cómic ambientado en Nueva York para demostrar que la Fantastic Factory, instalada en la capital catalana, "puede hacer películas que pueden competir con cualquier país". Para conseguirlo Yuzna, autor de algunos de los clásicos modernos del género como Re-sonator, Society o El dentista, se rodeó de un sólido equipo técnico, entre ellos, el director de fotografía Jacques Haitkin, que dejó su sello en Pesadilla en Elm Street, y los técnicos de efectos especiales Screaming Mad George (Poltergeist 2) y Poli Cantero (Acción mutante).

Yuzna firma el primer producto de la Fantastic Factory, un proyecto encabezado por el presidente de la distribuidora Filmax, Julio Fernández, al que el cineasta se sumó nada más conocerlo. En su decálogo de intenciones está el realizar películas fantásticas y de terror "que tengan público, comerciales" para competir en el mercado internacional con un sello propio.

De momento, tienen seis proyectos más en cartera, el más inmediato, Arachnid, una película que ultima Jack Sholder. En diciembre, Stuart Gordon comenzará a rodar en Galicia Dagon, largometraje en el que actuará Francisco Rabal y a principios de 2001, Jaume Balagueró dará inicio a su Darkness. Estos dos últimos cineastas presentaron ayer sus proyectos en San Sebastián.