"Tiene que estar en la prisión; fue un asesinato lo que hizo", dice un patriarca gitano
El patriarca gitano tío Aquilino habló ayer en nombre de la familia de Vicente Molina Maya, el que fue marido de Tany muerto el 16 de abril de 1995 en la infravivienda que el matrimonio poseía en la localidad de Mejorada del Campo (a 15 kilómetros de Madrid). El patriarca gitano quiso recordar los sentimientos que invaden a su gente, ellos son la otra parte de esta historia. "Tenía que estar dentro [de la cárcel] y no haber salido nunca. Todo esto ha ido hasta el Tribunal Supremo, que ha dejado las cosas como estaban. Ha sido un asesinato lo que ha hecho y la han dejado en la calle. ¿Qué pasa ahora?, ¿va a saber más toda esa gente que esos señores?", dice el tío Aquilino con una rabia contenida. A su lado, la esposa apostilla: "Sabemos dónde vive y no hemos hecho nada, y ha sido por sus hijos. Tiene ocho hijos, y cuatro de ellos llevan nuestra misma sangre".Tanto el juicio celebrado el 14 abril de 1999 en la Audiencia de Madrid como los cuatro años en que Tany ha vivido en Rivas con sus hijos Pedro, Carmen, Eusebio y Tamara, han estado rodeados de un cierto secretismo ante los rumores de que la ley gitana la había condenado por el homicidio de Vicente Molina, uno de los suyos. Nadie en Rivas dice saber dónde vive o cuál es su teléfono. El pueblo se ha convertido en su fiel guardián.
Por eso también hubo muchas precauciones en las sesiones del juicio y el tribunal habilitó una parte de la sala de visitas para los familiares del difunto, acaudillados por la matriarca del clan vestida de riguroso luto. Y, por eso, ayer el Ayuntamiento de Rivas puso a disposición de Tany un vehículo oficial para su traslado.
En casa del tío Aquilino aseguran que se dan por satisfechos con que se cumpla la justicia paya y desmienten que la sentencia gitana esté pendiente de ser ejecutada.
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