Un estudio eleva el gasto militar real en I+D a 241.000 millones

Presupuesto del CSIC

El gasto militar español definido como Investigación y Desarrollo (I+D) en el proyecto de presupuestos para 2001 asciende a 241.202 millones de pesetas, según ha calculado el experto Vicenç Fisas, titular de la Cátedra Unesco sobre Paz y Derechos Humanos (Universidad Autónoma de Barcelona). Dicha cantidad incluye 188.003 millones de pesetas de créditos adscritos al Ministerio de Ciencia y Tecnología (desglosados en 124.303 millones de préstamos a empresas del sector público y 63.700 millones de préstamos a empresas privadas), y 53.199 millones adscritos al Ministerio de Defensa. El Secretario de Estado de Política Cientícia y Tecnológica, Ramón Marimón, dijo el martes pasado que el total del gasto militar en el Ministerio de Ciencia y Tecnología asciende a 168.000 millones.La controvertida partida presupuestaria (técnicamente denominada el capítulo octavo de la Función 54) en la que predominan los préstamos a largo plazo para programas de construcción de unidades militares (principalmente los aviones de combate EF-2000, las fragatas F-100, los carros de combate Leopard y los aviones patrulla P-3 Orión), pese a estar adscrita al nuevo ministerio, ha sido sustanciosa en los últimos años. En 2000, Industria asignó 159.415 millones para dichos préstamos.

El presupuesto militar global para 2001, según cálculos de Fisas, asciende a 1.772.772 millones de pesetas, incluidos los capítulos de los ministerios de Ciencia y Tecnología y de Defensa y las cuotas a organismos internacionales. "Este faraónico gasto en armamentos es un insulto a la comunidad científica que trabaja en proyectos de utilidad social, y cuyos programas están muchas veces sujetos a restricciones presupuestarias debido a la prioridad que se concede a los programas militares", afirmó ayer el titular de la Cátedra Unesco. "La cifra para I+D militar en España es 12 veces superior a lo dedicado a investigación sanitaria".

En la discusión que ha generado el proyecto presupuestario para I+D el año que viene, Rolf Tarrach, presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) reiteró ayer que le hubiera gustado que el presupuesto para ciencia en el 2001 fuera más ambicioso ya que "este país será en 20 años lo que en este momento hagamos en educación, investigación y tecnología", informa Efe. En cuanto al problema del retraso en la financiación de proyectos científicos aprobados [ver EL PAÍS de 16, 17 y 18 de octubre], el presidente del CSIC comentó que "hay una explicación" que ya ha dado Marimón, pero puntualizó que no debe producirse en el futuro.