Absueltos cuatro jóvenes más que participaron en la consulta de la deuda externa
La juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Mataró ha absuelto a cuatro jóvenes vecinos de Teià (Maresme) acusados de desorden público por haber participado en una de las mesas de la consulta popular sobre la deuda externa celebrada el pasado 12 de marzo. Después de escuchar a los cuatro encausados y a los dos agentes de la Guardia Civil testigos del caso, el fiscal decidió no presentar cargos al considerar que los acusados no habían cometido ninguna infracción.Otros cuatro jóvenes de Alella estaban citados también ayer por la mañana por la misma causa, pero, en su caso, el juicio de faltas no se celebró porque los guardia civiles no se personaron al estar de vacaciones. En esta ocasión, la juez decidió aplazar la vista hasta el próximo 7 de noviembre. Uno de estos acusados de Alella, Ramon Arbós, apuntó que tanto ellos como sus abogados consideran "lamentable" tener que volver a los juzgados cuando la misma magistrada ha decidido absolver a sus compañeros y en otros juzgados con denuncias de la Guardia Civil los casos han quedado archivados. Arbós apuntó que sus abogados intentarán que el caso se archive antes de la próxima comparecencia.
Arbós agregó: "El juicio en sí es ridículo, sobre todo teniendo en cuenta que el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, José María Mena, manifestó que la fiscalía no presentaría cargos contra los acusados".
Los jóvenes encausados contaron durante el juicio con el apoyo de diferentes miembros de la Xarxa Ciutadana per l'Abolició del Deute Extern, a la que pertenecen. De hecho, la protesta empezó el pasado lunes a las siete de la tarde, cuando medio centenar de personas llevaron a cabo un pasacalle que salió del Ayuntamiento de Mataró. Bajo el lema Basta de juicios a la solidaridad, los manifestantes recorrieron el centro de la ciudad con pancartas, megáfonos y sirenas denunciando la "represión a los colectivos alternativos" y repartiendo octavillas en las que solicitaban que "nunca más, alguien sea acusado por promover una democracia más participativa". Ya delante de los juzgados, los manifestantes plantaron 14 tiendas de campaña en las que una treintena de ellos se quedaron para pasar la noche.
Los hechos se remontan al pasado 12 de marzo, cuando con motivo de las elecciones legislativas se convocó en toda Cataluña una consulta popular para conocer si los ciudadanos consideraban oportuno que el Gobierno perdonara la deuda externa a 84 países del Tercer Mundo.
