La Junta revisará el estado de salud de los ex empleados de la Fábrica de Uranio de Andújar

La Consejería de Salud se ha comprometido con los ex trabajadores de la Fábrica de Uranio de Andújar (FUA) a realizar todos los análisis médicos que reclaman para conocer su estado y a realizar la terapia preventiva que los médicos consideren necesario. El delegado en Jaén, Juan Francisco Cano, afirmó ayer: "Pueden hacerse las pruebas que ellos consideren necesarias, cuando quieran y donde quieran". La asociación de ex trabajadores ha criticado duramente que la Junta no ofreciera medios para que se les realice un seguimiento especializado, como el que se inició en el hospital Reina Sofía de Córdoba, parado sin explicaciones cuando aún no habían estudiado todos los casos.

Juan Francisco Cano pidió a los ex trabajadores que concreten el número de pacientes, qué pruebas son las que requieren y dónde quieren que se las hagan. Hasta ahora lo que han solicitado los antiguos empleados de la FUA es que las pruebas las practiquen expertos en medicina nuclear, lo que descarta que se realicen dentro de la provincia de Jaén.Los informes médicos se consideran una tabla de salvación desde la asociación, ya que es la prueba con la que esperan poder evitar las peticiones de archivo de la denuncia interpuesta en un juzgado de Andújar. Aunque el último escrito de la juez encargada del caso, Encarnación Aganzo, rechaza el cierre de diligencias, sí advierte en su resolución de septiembre pasado de que es difícil imputar delitos. También resalta que las pruebas que se piden desde la defensa no se han realizado aún por falta de especialistas que se comprometan a practicarlas.

Un informe realizado por cinco especialistas del Instituto Carlos III de Madrid sobre enfermedades en la proximidad de instalaciones nucleares en España destaca que la zona de Andújar presenta un exceso de mortalidad por leucemia, aunque también advierte de que hay muy pocos estudios que hayan analizado la influencia de las radicaciones sobre la población. Sólo entre los antiguos empleados de la fábrica han perdido la vida más de 40 personas, de un total de 126 miembros que tenía la plantilla estable de esta industria.

Los antiguos trabajadores de la FUA tienen documentación en la que se refleja que cuando todavía estaban en activo los análisis para determinar el uranio en la orina daban índices muy superiores a los máximos admisibles. En una ficha, por ejemplo, consta que en abril de 1964 un empleado tenía 116,40 microgramos por litro, cuando el límite estaba en 0,8. Esta situación en repetía cada año en los grupos de trabajadores.

Los representantes de la asociación de ex trabajadores se reunieron ayer con responsables sindicales de UGT y CC OO en Jaén. Éstos anunciaron que se personarán en la causa, aunque todavía tienen que ver de qué forma pueden hacerlo.