La ofensiva del Ejército filipino contra la guerrilla deja cuatro víctimas civiles

El tercer día de ofensiva militar del Ejército filipino contra Abu Sayyaf en la isla de Joló dejó cuatro civiles muertos en su intento de rescatar a los 19 rehenes secuestrados por la guerrilla separatista. El Gobierno filipino rechazó ayer los llamamientos de los guerrilleros a un alto el fuego y la reanudación de las negociaciones, y afirmó que ha conseguido acorralar "sin salida" a los secuestradores. Los rehenes -13 filipinos, tres malaisios, dos franceses y un estadounidense- están retenidos por varias facciones distintas de la guerrilla. Según los habitantes de Joló y funcionarios locales, los rebeldes se han dividido en una media docena de grupos de 100 a 500 miembros que se esconden en la isla para intentar escapar a la ofensiva, en la que participan unos 4.000 soldados y policías. Según estas fuentes, unos 200 hombres bajo las órdenes de su líder Galib Andang, alias comandante Robot, se esconden en las laderas de una montaña que cuenta con una red de túneles excavados durante la ocupación japonesa en la Segunda Guerra Mundial.

Además de los cuatro civiles, ocho miembros de la guerrilla han resultado muertos y 20 hechos prisioneros, mientras siete militares han resultado heridos desde el inicio del ataque el pasado sábado. Fuentes del Ejército filipino aseguraban ayer que no hay indicaciones de que los rehenes hayan sufrido ningún daño, desmintiendo informaciones que hablaban de heridos e incluso muertos entre ellos. Las autoridades temen que sean utilizados como escudos humanos. Francia, que ha condenado la intervención militar, volvió a reiterar ayer que la prioridad de Manila debería ser "la seguridad y la liberación de los rehenes".