Recuperadas una columna romana y dos basas medievales en Sevilla

Una columna romana y dos basas del medievo fueron recuperadas la semana pasada por la Guardia Civil de Sevilla en una operación desarrollada por el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) en el último mes. El material intervenido se encontraba en el interior de una casa de la localidad sevillana de La Campana. La Guardia Civil ha puesto a disposición judicial a su propietario, M. P. G., de 41 años, que declaró a los agentes que tenía estos objetos para decorar su vivienda.

Batidas

Las piezas, que serán entregadas al museo arqueológico de la provincia, han sido sometidas a un primer estudio por los expertos, que dataron las basas entre los siglos XIV y XV y atribuyeron a la columna una antigüedad de más de 2.000 años.El portavoz de la Guardia Civil, Rafael Pérez, dijo ayer que esta operación puede considerarse como "la más importante" realizada en Sevilla después de la operación Trajano, en la que se desarticuló una red de siete personas que procuraba monedas y piezas arqueológicas a un individuo para subastarlas por Internet.

Pérez explicó que la recuperación de la columna y de las basas se debe a las investigaciones que el Seprona empezó en julio, originadas por una confidencia acerca de que un vecino de La Campana había hallado unas piezas arqueológicas.

Indicó que las únicas pistas que se tenían, en ese momento, eran el nombre de pila del individuo y que éste poseía una retroexcavadora con la que, supuestamente, habría encontrado la columna y las basas.

Pérez señaló que el Seprona hizo distintas batidas por pueblos de la sierra sur para encontrar a quien hubiera hecho trabajos con retroexcavadora por la comarca, hasta que "se tuvo claro quién era el autor del expolio". A continuación, se procedió al registro de la vivienda del sospechoso, en la que se hallaron las piezas arqueológicas.El detenido, M. P. G., declaró que había encontrado la columna en un paraje próximo al término municipal de Lora del Río, "donde estaba haciendo un trabajo de canalización de agua de una finca", explicó un miembro del Seprona. En cambio, las dos basas las descubrió en el derribo de un cortijo cercano a la esclusa del río Guadalquivir a su paso por Sevilla.

La columna hallada está configurada en forma de espiral, con unos 105 centímetros de altura y unos veinte de diámetro, mientras que las dos basas tienen unos quince centímetros de altura, base circular y una serie de inscripciones ilegibles.

Rafael Pérez destacó el trabajo desarrollado por el Seprona en materia de protección del patrimonio en la comarca de Lora del Río, una zona de gran riqueza arqueológica en la que sus patrullas de vigilancia procuran inspeccionar todas las obras.