Bono exige la paralización de las obras del almacén nuclear de Trillo

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha solicitado, en carta dirigida al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, que ordene la paralización de las obras del almacén que albergará temporalmente los residuos nucleares de la central de Trillo (Guadalajara) porque carecen de evaluación de impacto ambiental. En la carta se advierte de que se presentará una queja ante la Unión Europea. El almacén fue autorizado por el Consejo de Ministros en julio del año pasado. Se trata de un hangar rectangular con unas dimensiones de 80 metros de largo por 43 de ancho y 21 de altura, que dará cobijo a 80 contenedores blindados, cada uno de los cuales puede almacenar 21 barras de residuos radiactivos. La central de Trillo es la única de las nueve que operan en España con tecnología alemana, y funciona desde 1988. Su piscina para guardar combustible usado se ubica dentro del edificio de contención del reactor, circunstancia que impide ampliarla. Sólo le queda espacio disponible para los residuos generados hasta 2002.

El ministerio ha considerado en consultas precedentes que no se requiere Evaluación de Impacto Ambiental cuando se trata de obras acometidas dentro de instalaciones nucleares autorizadas, según un portavoz del Consejo de Seguridad Nuclear.