Capturados 26 miembros de una red de ladrones de joyerías y pisos
Veintiseis supuestos integrantes de una red delictiva, especializada en robos a joyerías y domicilios, han sido detenidos en Madrid en una operación conjunta del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Civil, informaron anoche fuentes policiales. Los arrestados no están implicados en los últimos robos con secuestro de joyeros ocurridos durante el último mes, según las investigaciones. Las fuerzas de seguridad del Estado implican a los detenidos en un número aún no concretado de robos en pisos, donde se apoderaban preferentemente de las alhajas.
La operación se saldó la noche del jueves con la captura de 26 personas, originarias de Suramérica, aunque en su mayoría tienen nacionalidad colombiana. Según fuentes de la investigación, no forman una banda compacta y jerarquizada, sino más bien una red cuyo nexo de unión es el hecho de estar especializados en la misma modalidad delictiva.
El peso de la operación ha sido llevado por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) del Cuerpo Nacional de Policia de Madrid, que realizó cinco registros domiciliarios, en los que se incautaron tres armas de fuego y una importante cantidad de joyas, cuyo valor es "muy dificil de precisar", según un mando policial.
A las 10 de la mañana de hoy está prevista una rueda de prensa en la Dirección General de la Guardia Civil a la que asistirán el delegado del Gobierno en la Madrid, Francisco Javier Ansuátegui; el coronel de la Comandancia de la Guardia Civil, Juan Ramos, y el jefe superior de Policía, Julio Corrochano.
Esta operación policial se produce en un momento en que el gremio de joyeros está muy sensibilizado por la ola de atracos y robos que viene padeciendo en los últimos meses. Actualmente, los joyeros tienen en marcha una campaña publicitaria con cuñas radiofónicas en las que denuncian el miedo que han de afrontar a diario. El próximo día 20, el gremio tiene convocado un cierre parcial en toda España como forma de protesta por la inseguridad que padece y que le ha supuesto pérdidas por valor de 15.500 millones en los últimos cinco años.
