50 psicólogos ayudarán a los servicios de emergencia en casos de catástrofe

Los servicios de emergencias de Euskadi cuentan desde ayer con una nueva ayuda: la del Colegio de Psicólogos. Un convenio de colaboración firmado entre el colegio y el Departamento de Interior permitirá que un equipo de unos 50 psicólogos esté permanentemente a disposición de la Dirección de Atención de Emergencias para atender a las víctimas o a sus familiares en cualquier tipo de catástrofe. También impartirán cursillos a todos los cuerpos que participan habitualmente en estas acciones.

Con la tragedia de Biescas (Huesca) en 1996, en la que una riada acabó con la vida de 90 personas, quedó patente la necesidad de crear un servicio de ayuda psicológica a las víctimas de catástrofes, recalcaron ayer tanto el consejero de Interior, Javier Balza, como el presidente de la delegación en Euskadi del Colegio de Psicólogos, Juan Manuel Egurtza. Por eso, en 1999 comenzaron las conversaciones entre ambos organismos, a partir de una propuesta del Gobierno vasco, que se materializaron ayer en la firma del convenio de colaboración.Con un presupuesto de un millón de pesetas para este año, el acuerdo permite la creación de un cuerpo de 50 psicólogos que estarán a disposición de forma permanente de los servicios vascos de emergencia. También asegura la realización de simulacros y la edición de un manual de emergencias psicológicas que "ya está siendo redactado y que esperamos sea editado para el último trimestre de este año", explicó Egurtza. Además, posibilita la formación en materia de tratamiento psicológico básico de las personas que habitualmente participan en los casos de catástrofe, como bomberos, servicios sanitarios o la Ertzaintza.

Estos cursillos pretenden igualmente enseñar a valorar a los servicios de emergencias cuándo es necesaria la intervención de psicólogos y su número, pues serán ellos los encargados de movilizar este servicio. Un total de 42 psicólogos de los 2.700 que hay en Euskadi ya se han apuntado para integrar el servicio.

Las catástrofes en las que serán requeridos "irán desde riadas o incendios a accidentes de tráfico o incluso atentados. Sin embargo, no es el terrorismo el motivo ni el objetivo de este convenio", aclaró Egurtza.Los psicólogos estarán cubiertos siempre por un seguro.

Con vigencia para este año, la intención es prorrogarlo año a año, siempre que el presupuesto de la Dirección de Atención de Emergencias pueda financiarlo. Egurtza apuntó: "Un millón de pesetas es suficiente para lo que queda de año y si el próximo necesitasemos más dinero creo que se podría conseguir".

Éste es el tercer acuerdo entre el Colegio de Psicólogos y una comunidad autónoma, tras los firmado con Baleares en 1998 y Murcia en 1999.