WorldCom y Sprint suspenden su alianza por la oposición del Gobierno de EEUU y la UE
Los gigantes telefónicos estadounidenses WorldCom y Sprint decidieron ayer suspender su fusión ante las pegas no sólo de la Unión Europea, sino por la demanda preventiva por monopolio presentada por el Departamento de Justicia de Estados Unidos. "La fusión de WorldCom y Sprint", declaró Janet Reno, titular de Justicia, "amenaza con anular los beneficios para la competencia conseguidos desde que este departamento desafió hace 25 años el monopolio de la industria de las telecomunicaciones que detentaba AT&T". Aquel desafío, también en forma de demanda, terminó con la fragmentación de AT&T en una firma de larga distancia y ocho compañías regionales.
En la oposición del Gobierno estadounidense a la fusión de WorldCom y Sprint, una operación valorada en 129.000 millones de dólares, desempeña un papel determinante Joel Klein, el fiscal que dirige en Justicia el área de lucha contra los monopolios y que encabeza el pulso con Microsoft. Klein, al que Reno llamó ayer bromeando "el hombre más ocupado de Washington", declaró que ahora WorldCom y Sprint, la segunda y tercera compañías telefónicas de EEUU, compiten con gran agresividad en beneficio de los servicios recibidos y las tarifas pagadas por los usuarios.La adquisición de Sprint por WorldCom es la mayor operación empresarial jamás puesta en la picota de antemano por el Ejecutivo estadounidense, informó el departamento de Justicia. Dos otras grandes fusiones en marcha, las de America Online y Time Warner y AT&T y Media One, están siendo también escrutadas con atención por los fiscales públicos, confirmaron fuentes de Justicia.
"Si se permite a WorldCom la adquisición de Sprint, las grandes y pequeñas empresas y millones de consumidores individuales tendrían que pagar precios más altos y aceptar menos innovaciones y peor calidad en el servicio", declaró Klein. Los mercados de Internet y llamadas de larga distancia serían, según el fiscal, los más dañados por el matrimonio de los colosos.
El anuncio de la agresiva acción del Gobierno estadounidense se produjo un día después de que el italiano Mario Monti, responsable de la política de defensa de la competencia de la Unión Europea, hubiera declarado que WorldCom y Sprint han ofrecido "una respuesta poco satisfactoria" a sus preocupaciones. La Unión Europea ha expresado su temor a que el gigante resultante de la adquisición de Sprint por WorldCom se coloque en situación de dominar el acceso a Internet en Europa y el mundo. Una decisión será tomada el 12 de julio por la Comisión Europea.
Retirada momentánea
La decisión gubernamental de presentar batalla forzó a las dos compañías a indicar, en un comunicado conjunto, que "a la luz del anuncio del Departamento estadounidense de Justicia, que presentó una demanda para bloquear la fusión, retiramos nuestro proyecto de fusión presentado ante la Comisión Europea para su examen (...) Si en el futuro decidimos proceder a esta fusión, la notificaremos nuevamente, tal como está previsto en el reglamento europeo sobre fusiones y adquisiciones", destaca el comunicado. Antes de que se conociera la decisión conjunta, fuentes del entorno del presidente de WorldCom, Bernard Ebbers, habían dejado entrever que el hombre que en cinco años había hecho 75 adquisiciones, estaba dispuesto a abandonar la operación de fusión antes de enfrentarse a batallas legales.
Acompañando las palabras con los hechos, el departamento de Justicia presentó ayer su demanda en un tribunal de Washington. Es, en resumen, una petición para que el poder judicial prohíba la fusión entre los dos colosos de las telecomunicaciones. En la ley antimonopolio Shermann queda establecido que el departamento de Justicia se encarga de velar por su cumplimiento a través, precisamente, de este tipo de acciones: la presentación en los tribunales de demandas contra fusiones, adquisiciones y actitudes empresariales peligrosas para la libre competencia.
Klein manifestó ayer que, aunque el departamento de Justicia estadounidense mantiene estrecho contacto con las autoridades antimonopolio europeas, la decisión de librar batalla judicial contra la fusión de WorldCom y Sprint ha sido adoptada tras un análisis que ha durado casi nueve meses y que ha concluido con que esta operación es contraria a los intereses de los consumidores. Los cambios propuestos por las dos empresas no han tranquilizado las inquietudes de Klein.
En el mercado de llamadas de larga distancia WorldCom y Sprint no solo compiten en EEUU con AT&T, sino entre sí. Cada una de esas empresas ha construido grandes redes nacionales e internacionales de fibra óptica, ha desarrollado sistemas complejos para asumir millones de cuentas de clientes y ha contratado y entrenado a miles de trabajadores capaces de ofrecer una gran variedad de servicios de telecomunicaciones de alta calidad. Esos elementos positivos para el público se ven amenazados por la fusión, según Klein.
El departamento de Justicia cree que la integración en una empresa de los números dos y tres estadounidenses sería perjudicial, entre otras áreas, en las llamadas de larga distancia en el interior de EE UU, con WorldCom detentando el 19% del mercado y Sprint el 8%; las líneas específicas para Internet, en las que WorldCom posee el 37% del tráfico y Sprint, el 16%, y las llamadas desde EE UU al extranjero, en los que la suma de ambos supone el 30%.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.