Una modesta representación para el entierro

Una representación extranjera de nivel modesto acudirá mañana a los funerales del presidente sirio, Hafez el Asad. Salvo el presidente francés, Jacques Chirac, ningún otro alto dignatario occidental había anunciado ayer su participación. Sólo cinco dirigentes árabes había anunciado ayer que estarán presentes en los funerales de Asad en su pueblo natal de Kardaha, a 300 kilómetros al norte de Damasco, frente a las decenas de soberanos, presidentes y primeros ministros llegados del mundo entero a Jordania para las exequias del rey Hussein de Jordania, en 1999.El líder palestino, Yasir Arafat; el rey Abdalá II de Jordania; los presidentes de Líbano, Emile Lahoud, y Yemen, Alí Abdalá Saleh, y el emir de Kuwait, Jaber al-Ahmed al-Sabaj, estarán en Siria. Para el líder palestino, denostado por Siria por alcanzar acuerdos por separado con Israel, será su primera visita desde 1996.

EEUU, Reino Unido y Alemania estarán representados por los jefes de sus diplomacias, Madeleine Albright, Robin Cook y Joschka Fischer. Italia enviará al presidente del Senado; Austria, al presidente del Parlamento, y Portugal, al ministro adjunto del primer ministro. España no había anunciado ayer su representación. Tanto los Reyes como el presidente del Gobierno, José María Aznar, enviaron el sábado mensajes de pésame a Siria.

La delegación más sorprendente, sin embargo, es la que envía Irak, el enemigo histórico de Siria. El vicepresidente de Irak, Taha Mohieddine Maarouf, representará el martes a su país en los funerales del presidente sirio, según anunció ayer Radio Bagdad. Maarouf será el primer responsable iraquí de semejante rango que viaja a Siria tras la ruptura de relaciones, en 1980, entre los dos países, gobernados por ramas rivales del partido panárabe Baaz. Siria tomó parte a favor de Teherán en la guerra irano-iraquí (1980-1988) y participó en la coalición internacional contra las tropas iraquíes en la guerra de Kuwait, en 1991.