El hijo de Asad asume el mando militar sirio para acceder al poder

Bachar el Asad, hijo del fallecido presidente Hafez el Asad, ha empezado a controlar las riendas del poder en Siria. El presidente en funciones, Abdel Halim Jadam, firmó ayer el decreto que convertía a Bachar en jefe del Ejército, cargo que, junto a la jefatura del partido oficial Baaz, es la clave del poder, y le ascendía a teniente general. Horas antes, el partido único le nombraba candidato oficial a la presidencia. Mientras, el país prepara unas grandiosas honras fúnebres para quien controló el país durante casi 30 años.

El Parlamento sirio deberá aprobar el nombramiento de Bachar el Asad, de 34 años, en su pleno del 25 de junio. Luego elaborará el decreto que convocará un referéndum para ratificar al hijo de Hafez el Asad como presidente. El sábado pasado, ya había sido modificada la Constitución, bajando la edad para acceder a la jefatura del Estado de 40 a 34 años. Mientras el régimen sirio prepara un grandioso funeral al León de Damasco empiezan a llegar las delegaciones que asistirán a las exequias. La representación occidental será más bien modesta: el único jefe de Estado o de Gobierno que ha anunciado su presencia en Damasco es el presidente francés, Jacques Chirac. Estados Unidos, el Reino Unido y Alemania estarán representados por los jefes de su diplomacia. Entre las representaciones árabes destaca la de Irak, enemigo de Siria, que estará encabezada por un vicepresidente. La evolución de la situación en Siria está siendo seguida con especial atención en Israel. Las negociaciones de paz entre ambos países se encuentran bloqueadas por el problema del Golán sirio, ocupado por Israel desde la guerra de 1967. Ayer, el primer ministro israelí, Ehud Barak, declaró, tras el Consejo de Ministros, que la desaparición de Hafez el Asad abre una etapa muy distinta en Oriente Próximo y auguró un cambio en las relaciones con el vecino país.