Sinceridad e ilusión

A caballo entre la canción de autora y un tímido pop-rock urbano, en el que cabe casi de todo, esta zaragozana ha ido tejiendo unos mimbres de sincera belleza musical, y ha logrado grandes aciertos que le señalan la mejor de las direcciones. Junto al guitarrista y compañero de aventuras Juan Aguirre y a otros músicos de correcta solvencia, Eva Amaral presentó los temas de su segundo disco, Una pequeña parte del mundo, mostrando efectivamente que empieza a pisar fuerte sobre las tablas, tras curtirse en cientos de pequeñas salas.Vestida de amazona y con esa poderosa garganta que hace de su voz una seña de identidad completa, la cantante y su grupo armaron un bonito concierto de melodías nocturnas, soledades, sexo apasionado y ensoñaciones. Sus nuevos temas van combinando los viejos lazos acústicos con ritmos más tecnológicos y bailables, cosa que le vendrá estupendamente para hacer llegar mejor sus canciones a públicos más amplios. Entre sus nuevas composiciones caben destacar las hermosas Los aviones no pueden volar o Subamos al cielo. Pero, sin duda, la parte más brillante y redonda de la actuación correspondió a una de las mejores baladas acústicas recientemente escritas e interpretadas por una mujer en España: Voy a acabar contigo. Amaral merecen, por la sinceridad y la ilusión que ponen en lo que hacen, la mejor de la suertes.