El borrador de la ponencia política de CDC acentúa su ideario soberanista

El borrador de la ponencia política que Convergència Democràtica deberá aprobar en su congreso de noviembre representa un indiscutible triunfo de la línea más soberanista del partido. La ponencia, dirigida por el consejero de Economía y futuro secretario general, Artur Mas, acentúa el giro nacionalista y reivindicativo que ha dado CDC con la dirección surgida en el anterior congreso de 1996, y supone un claro distanciamiento con las tesis que defienden el sector más moderado del partido, agrupado en torno a la plataforma Catalanisme i Progrés, y sus socios democristianos de Unió.

No hay repliegue hacia posiciones más pragmáticas o catalanistas moderadas. Todo lo contrario, el borrador de la ponencia política propone un salto adelante hacia la conquista de nuevas cotas de soberanía para Cataluña y continúa basando el ideario convergente en el nacionalismo identitario de "lengua y cultura". A partir del congreso, CDC deberá fundamentar su estrategia en "profundizar aquellos elementos que nos definen como nación y que ponen énfasis en conseguir nuevas cotas de autogobierno desde una concepción soberanista", se afirma en este esquema de ponencia, que las distintas agrupaciones territoriales deberán discutir hasta noviembre. En esta línea de actuación, los redactores de la ponencia opinan que la misión de Convergència debe ser "generar conciencia nacional" y ampliar el partido mediante la incorporación de otros sectores sociales a este ideario. No sin aparcar "la gestión" del Gobierno, "que debe mejorarse permanentemente".La ponencia incorpora los argumentos de la Declaración de Barcelona al reclamar el reconocimiento de la plurinacionalidad de España y la necesidad de alcanzar un pacto por el autogobierno en Cataluña, que Jordi Pujol ya defendió en su conferencia en ESADE.

Respecto a la coyuntura política española y catalana, la ponencia defiende la necesidad de superar el "actual marco negociador [CiU-Gobierno central]" y apuesta por dar prioridad a las relaciones bilaterales "Cataluña-España", mediante la consecución de unas amplias mayorías en el Parlament sobre "cuestiones estratégicas". Esta nueva estrategia supone, según CDC, la única posibilidad de que Cataluña consiga un incremento sustancial del autogobierno y una mejora del sistema de financiación tras la mayoría absoluta del PP y la fragilidad parlamentaria de Convergència i Unió en Cataluña.