Javier Vázquez: "Hoy lo que de verdad cuenta son las orejas"

Javier Vázquez es un torero que viene hoy a la feria con un corto bagaje de corridas toreadas. La temporada pasada sólo se vistió de luces nueve tardes, la última en Barcelona, en agosto, con el resultado de una vuelta al ruedo en cada toro. Pese a ello, el torero de Chamberí no ha vuelto a torear en España. "Hoy lo que de verdad cuenta son las orejas", dice. "Las vueltas al ruedo, aunque sean en una plaza importante, como la de Barcelona, no sirven para que se te abran las puertas de las empresas".De esas nueve corridas de 1999, la mayoría fueron frente a astados de ganaderías consideradas duras por los aficionados. En la feria isidril salió con toros de Juan Luis Fraile y Celestino Cuadri; en Pamplona se las vio con las difíciles reses de Adolfo Martín y en Sevilla con los encastados de Cebada Gago. Aunque son demasiadas corridas de hierros no comerciales, el matador no se considera encasillado en esa especialidad. "También he matado corridas de encastes más ligeros y creo que lo que me caracteriza es un término medio. Ni la corrida dura ni la que podríamos llamar blanda", dice. Y añade que lo que más le ha ido a su forma de concebir el toreo han sido toros como "los de Samuel Flores o Peñajara, por ejemplo".

Lucimiento

Alguien podría creer que es preferible enfrentarse con esos hierros que no quieren las figuras antes que con el toro apto para los privilegiados, que sale sin fuerza y casi siempre se cae. Pero Javier Vázquez no parece estar de acuerdo: "Es evidente", dice, "que con ese toro que está saliendo, que se cae cada dos por tres, yo no puedo lucirme en absoluto. Ni yo ni nadie. Pero también es cierto que cuando el toro tiene calidad, tiene recorrido, mete la cara en el engaño y se le puede llevar con largura, uno se puede encontrar a gusto y triunfar, sin necesidad de que sea un toro difícil. Porque muchas veces se confunden genio y casta. Siempre que ese toro no se caiga, claro".

En San Isidro del año pasado sólo obtuvo una ovación en la tarde de Fraile. "Es la primera vez que me he ido de la feria sin cortar oreja o dar una vuelta al ruedo y eso lo he notado después, porque la temporada se me puso muy difícil". No obstante, ese bajón en el número de contratos no le ha hecho venirse abajo ni ha afectado a su moral. Así lo reconoce: "No estoy bajo de ánimo en absoluto. Me encuentro con mucha ilusión y aunque este año no he toreado en España sí lo hice en Riobamba (Ecuador) con mucho éxito, y aunque un triunfo en Madrid es muy difícil estoy esperanzado".

Hoy va a ponerse delante de dos toros del Conde de la Corte, de los que dice: "Espero que me sirvan. Este tipo de toro lo suelo entender bastante bien y, en realidad, he sido yo quien ha pedido que me pongan en esta corrida".

La corrida de hoy, 19ª de abono. Toros del Conde de la Corte para Manolo Sánchez, Javier Vázquez y Dávila Miura. A las 19.00.