Los suizos aprueban por clara mayoría romper su aislamiento con la UE

Los suizos dieron una excelente prueba de pragmatismo económico ayer al votar en favor de siete acuerdos bilaterales que regularán sus relaciones con los 15 países de la Unión Europea. Con un claro 67,2% en favor del sí (1.497.192 personas) y un 32,8% votando por el no (730.854), Suiza se acerca a Bruselas y rompe el aislamiento económico que se había autoimpuesto. Sin embargo, y como adelantó anoche el Gobierno suizo, este resultado no avala una futura adhesión a la UE, algo que, como pronto, se puede plantear a partir de 2003.

Para el ciudadano de esta pequeña nación de 6,5 millones de habitantes -en la que los estatutos de "no miembro de Naciones Unidas" y "no miembro de la UE" forman parte de la conciencia colectiva-, el voto mayoritario en favor de los siete acuerdos bilaterales constituye toda una revolución. No importa que sólo votara el 47,4% del censo. Lo que al Gobierno le importa, así como a las élites políticas progresistas y a los medios empresariales, es que el pueblo ha dicho sí a unos acuerdos que afectan a la libre circulación de personas, al transporte terrestre y aéreo, a la investigación y el desarrollo, a los productos agrícolas, a las barreras técnicas para a la asignación de contratos públicos y al comercio. Todos los cantones suizos dieron su confianza a los bilaterales con dos excepciones: el pequeño cantón de Schwyz (Suiza central, de lengua alemana), donde el no ganó por un 50,2% frente a un 49,8% a favor, y el del Ticino (sur, de lengua italiana), con un 57% de votos negativos. El no en Ticino no ha sido ninguna sorpresa, pues desde un primer momento este cantón se opuso a los acuerdos, entre otros aspectos, por el temor a que la libre circulación de personas haga llegar una ola de emigrantes italianos que trabajen con menores salarios.

"Malos acuerdos interiores"

Los perdedores, sin embargo, creen que los aprobados ayer no son sino "malos acuerdos interiores", como dijo el diputado Hans Fehr, de la Acción por una Suiza Independiente y Neutral (ASIN).

El Consejo Federal (Gobierno) suizo mostró ayer su satisfacción por la importante victoria del sí a los acuerdos bilaterales con la Unión Europea, aunque de momento no está previsto reactivar el debate sobre la adhesión. El consejero federal (ministro) de Economía, Pascal Couchepan, explicó a la prensa que "el pueblo suizo debía solamente responder a una pregunta y ha dicho sí a los acuerdos bilaterales". El Consejo Federal no quiere interpretar estos resultados como un apoyo a la posible solicitud de entrada de la Confederación Helvética en la UE, "aunque éste sea el objetivo a largo plazo del Gobierno", aseguró, por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores, Joseph Deiss. Durante toda la campaña realizada a favor de los acuerdos bilaterales, el Gobierno recalcó hasta la saciedad la idea de que el sí no era un paso hacia la integración en los Quince ni una pérdida de soberanía o neutralidad, que era el temor de muchos ciudadanos. Para Deiss, una petición helvética de ingreso en la Europa comunitaria es poco probable antes del año 2003 y, antes de hablar de integración, habrá que observar los efectos de la aplicación de los acuerdos y disponer de un importante consenso político.