Más de 12.000 personas se manifiestan en Barcelona contra el próximo desfile militar

Más de 12.000 personas se manifestaron en la tarde de ayer en Barcelona para protestar por la celebración, el próximo día 27, del desfile militar conmemorativo del Día de las Fuerzas Armadas. Por la mañana, el presidente del PP en Cataluña, Alberto Fernández Díaz, arremetió contra el Ejecutivo de Jordi Pujol por su "actitud bastarda e inaceptable" ante la mencionada celebración. Tras una reunión en Barcelona con el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, el líder de los populares catalanes acusó al Gobierno de CiU de consentir y apoyar las manifestaciones en contra del desfile militar, y advirtió de que, si no rectifica, la Generalitat tendrá que responder de los incidentes que puedan acontecer ese día.

La marcha, organizada por la Plataforma Unitaria por la Paz, iba encabezada por una pancarta que rezaba: "Ningún ejército defiende la paz". La manifestación congregó a 12.000 personas, según la Guardia Urbana, y a 100.000, según la organización. La marcha transcurrió sin incidentes y al final se leyó un manifiesto de carácter antimilitarista. Desde todos los sectores involucrados se había pedido un esfuerzo para que la convocatoria, la mayor que se ha celebrado en Barcelona desde que se inició esta polémica, tuviese un tono lúdico y festivo. Algunas personas comparecieron disfrazadas de soldado o portando flores y llamativos atuendos. Esta actitud de "evitar problemas con la autoridad" se vio reflejada cuando la marcha pasó frente a la comisaría de policía de Via Laietana, donde un grupo de participantes hizo una cadena humana para que nadie pudiese increpar físicamente a las fuerzas del Cuerpo Nacional de Policía que aguardaban dentro de los furgones. En la marcha participaron sindicatos y juventudes de todos los partidos catalanes, a excepción del PP, objeto de críticas por las declaraciones de su presidente, Alberto Fernández Díaz, y por el presidente gallego, Manuel Fraga. Entre los manifestantes estaba el diputado de CiU Carles Campuzano, a título personal.

Fernández Díaz afirmó: "No es coherente impulsar una campaña para mejorar la imagen de nuestra comunidad y al mismo tiempo fomentar estos actos que producen un rechazo hacia Cataluña".

El dirigente popular aconsejó al PSC que no se una a la campaña de descrédito que CiU lleva a cabo contra el Ejército. En este sentido, hizo referencia a la moción que mañana, lunes, aprobará, casi con toda seguridad, el Ayuntamiento de Badalona, con los votos favorables de los ediles socialistas, en la que se insta a Defensa a que cambie el sentido del Día de las Fuerzas Armadas.

El presidente de la Xunta, por su parte, se mostró "indignado" por el tratamiento que el Ejército está recibiendo en Cataluña. "Me parece poco serio estar jugando con el Ejército, que es una parte esencial del pueblo español", declaró airado.

Por otra parte, el presidente Jordi Pujol pidió ayer a los catalanes que recuperen "la fortaleza" y el sentimiento de "autoestima" que les llevó hace 40 años "a no rendirse" ante los ataques contra Cataluña. "Necesitamos la misma fortaleza y autoestima, porque en el momento actual también existen dificultades muy insidiosas. No hay que tener miedo, aunque hay motivos para tenerlo", dijo.