El CVC insta al Consell a crear un organismo que proteja la huerta

El futuro de la huerta pasa por aplicar la legislación sobre patrimonio y la ley de espacios naturales, de acuerdo con el dictamen que ayer hizo público el Consell Valencià de Cultura (CVC). Estas medidas se deberían completar con un organismo, creado por las Cortes o el Consell, que protegiera este medio natural. El presidente del CVC, Santiago Grisolía, limitó "lo que se puede salvar" a la zona norte de la huerta.

"No sé lo que se podrá salvar, fundamentalmente la parte norte, próxima a la acequia de Montcada". Las palabras de Santiago Grisolía no dejaron demasiado margen a la esperanza para el fururo de la huerta que rodea la ciudad de Valencia.El presidente del CVC presentó ayer el dictamen elaborado por la institución sobre la conservación de este espacio natural. Tras consultar a numerosas instituciones y agentes relacionados con el medio, el CVC aboga por alcanzar "un pacto social" que coordine los distintos intereses -suelo urbanizable, rentabilidad de la tierra, entre otros-. Además insta al Consell o a las Cortes a crear un organismo "supramunicipal e interinstitucional" que sea "capaz de resolver problemas de dispersión de competencias".

El informe propone la creación de una denominación de origen de los productos, además de la mejora de las infraestructuras productivas y comerciales "para que Valencia pueda seguir siendo el primer mercado de su huerta" y formar a las nuevas generaciones de agricultores en "una gestión moderna de la tierra y sus productos".

El estudio también alienta a estudiar nuevas fórmulas no tradicionales de explotación comercial, entre las que destaca el turismo y actividades educativas y pedagógicas.