Hermoso de Mendoza espera dar la talla en la Maestranza

El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza retorna hoy a la plaza de toros de Sevilla, de la que la última vez, en la Feria de Abril pasada, salió por la puerta del Príncipe y con el rabo de uno de sus oponentes entre las manos."Superar la actuación del año pasado es imposible", decía ayer el matador en un alarde de prudencia, aunque para tranquilidad del público afirmó que intentará aproximarse "al nivel que di aquella tarde".

Condiciones las tendrá todas a favor. La ganadería, la misma de aquella tarde. Toros de Fermín Bohórquez, compañero en el cartel de hoy, con los que el navarro ha tenido ya actuaciones que le traen sabor a gloria. Además del ejemplar que acabó sin rabo en la Maestranza, Hermoso recuerda un ejemplar de Bohórquez con el que triunfó en El Puerto de Santa María la pasada temporada y otro con el que cuajó "una faena muy especial en Zaragoza", dice el torero.

La cuadra, en plena forma. Con Cagancho a la cabeza vienen caballos y caballista de triunfar ayer en Arles, en una corrida matinal mano a mano con Andy Cartagena, en la que jinete y monturas han cortado tres orejas, una por cada una de las reses de Los Espartales a las que se enfrentaron.

Y la moral, por las nubes. Triunfos en Francia añadidos, Hermoso de Mendoza se sabe el dueño del corral y, aunque certifica que los éxitos en Sevilla o Madrid son fundamentales para "refrendar la posición de un torero en el escalafón", afronta el desafío con la tranquilidad que da saber que una actuación peor que la que recuerdan los aficionados sevillanos no cambiará el rumbo de una carrera ascendente.

Así las cosas, lo que el rejoneador define como "un compromiso que es todo un reto" puede servir, si le acompañan suerte y toros, para confirmar una vez más quién es el que manda en el mundo del toreo a caballo.

Paro de subalternos

Por otra parte, los subalternos participantes en la corrida de ayer secundaron, tras el paseíllo, un paro de un minuto (que no pasó de 30 segundos) convocado por la Unión Nacional de Picadores y Banderilleros en protesta por la falta de un sistema de acceso al registro de profesionales, dependiente del Ministerio del Interior, que garantice la adecuada preparación de los mismos.

La Unión, que decidió este paro en una asamblea celebrada el pasado día 5, reclama que los aspirantes participen en un mínimo de festejos previos y pasen un examen similar al de conducir. Los paros se realizarán cada vez que los profesionales participen en una corrida televisada.

De otro lado, Víctor Cañas, uno de los banderilleros de la cuadrilla de Eugenio de Mora, tuvo que pasar a la enfermería tras sufrir una aparatosa caída al saltar el callejón. El doctor Ramón Vila le diagnosticó una distensión en el codo derecho.