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El Reino Unido concede a Almodóvar los premios al mejor director y a la mejor película extranjera

'American beauty' consigue seis galardones de la Academia Británica de Cine

Isabel Ferrer

Pedro Almodóvar hizo anoche historia cinematográfica en el Reino Unido al arrebatarle el Premio Bafta a la mejor dirección, otorgado por la Academia Británica de Cine, a su colega Sam Mendes, ganador de un Oscar por American beauty, su primera cinta. Todo sobre mi madre, el filme que le ha valido al director español el mayor reconocimiento internacional, obtuvo también el galardón a la mejor película extranjera. Los trofeos equivalen a los preciados oscars estadounidenses, y los británicos, que han sido acusados de seguir los gustos de Hollywood, decidieron cerrar esta vez la votación antes de que la meca del cine hiciera públicos sus premios. American beauty obtuvo seis distinciones.

Pedro Almodóvar dijo anoche en Londres, al recibir el Premio David Lean a la mejor dirección por Todo sobre mi madre: "No me lo esperaba. Estoy tan emocionado que no sé qué decir". "Cuando era niño creía que los actores eran los que hacían las películas, pero cuando descubrí que detrás de las cámaras había alguien dije: 'Este es el sitio donde quiero estar", afirmó el director español, que recibió también el Bafta a la mejor película extranjera. Almodóvar dio las gracias a los organizadores de la gala por no cortale, aludiendo a la interrupción que sufrió el pasado 26 de marzo cuando recogió en Los Ángeles el Oscar a la mejor película en habla no inglesa.

El adelanto del cierre de las votaciones de la British Academy Film Awards para los premios Bafta ha sido interpretado como un gesto de independencia respecto a los oscars de Hollywood, que finalmente ha dejado en manos de Almodóvar el Premio David Lean, instaurado en recuerdo del legendario director británico de películas como Lawrence de Arabia y Doctor Zivago.

Para el cineasta manchego, que competía en este galardón con Sam Mendes, el director de American beauty, fue un triunfo inesperado. El galardón a la mejor dirección sorprendió incluso a los críticos autóctonos, que daban como ganador seguro de la velada a Sam Mendes.

Como director, Pedro Almodóvar se enfrentaba además a Neil Jordan (The end of the affair), M. Night Shyamalan (El sexto sentido) y Anthony Minghella (El talento del señor Ripley). En la categoría de película en lengua no inglesa competía con Buena Vista Social Club (de Ulrich Felsberg, Deepak Nayar y Wim Wenders), Festen (de Briggite Hald y Thomas Vinterberg) y Run Lola run (de Stefan Arndt y Tom Tykwer).

Convertido en el niño mimado de la industria cinematográfica, el director teatral británico de 35 años Sam Mendes no se fue sin embargo de vacío. American beauty fue elegida la mejor película del año después de haber recibido las mejores críticas recordadas en el Reino Unido en muchos años. Sus principales intérpretes, Kevin Spacey y Annette Bening, obtuvieron los Bafta correspondientes a la mejor interpretación masculina y femenina, respectivamente. Spacey logró el Oscar en la misma categoría. Tariq Anwar y Christopher Greenbury se llevaron el galardón al mejor montaje y la película logró hacerse también con el premio a la mejor cinematografía y el Premio Anthony Asquith de la música, que recayó en Thomas Newman. American beauty logró finalmente seis baftas, un galardón más que en la última edición de los Oscar de Hollywood.

Aunque sin el derroche de medios que convierte a los Oscar en espectáculo difícil de igualar, los Baftas disfrutan de un sólido prestigio fuera también del país. Este año, además, la Academia británica de Cine ha querido hacer las paces con Stanley Kubrick, cuya película La naranja mecánica ha sido demonizada en el Reino Unido durante décadas por su violencia. A título póstumo le fue concedido un trofeo honorífico al director fallecido en marzo del año pasado.

El actor Michael Caine, que ha visto resurgir su carrera y que recibió un Oscar al mejor actor secundario por Las normas de la casa de la sidra, recibió asimismo anoche un Bafta honorífico al conjunto de su carrera, que le convierte en miembro de honor de la Academia británica.

Su compatriota Jude Law se llevó el galardón a la mejor actuación secundaria masculina por El talento del señor Ripley. Maggie Smith, que posee todos los premios posibles, dentro y fuera de su país, obtuvo el de la mejor actuación secundaria femenina por Té con Mussolini.

Topsy-Turvy, de otro británico, Mike Leigh, fue elegida por su maquillaje, y The Matrix, por sus efectos especiales y sonido. El mejor guión original fue para Charlie Kauffman por Being John Malkovich, calificada por la crítica nacional de "extraña, original y desazonadora película".

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