PP y PSOE pactan con la Mesa del Congreso el reparto de las presidencias de las comisiones

El acuerdo de última hora, la noche del martes, entre el PP y el PSOE para respaldar ampliamente los nombramientos de las presidentas del Congreso y el Senado, Luisa Fernanda Rudi y Esperanza Aguirre, y la composición de las Mesas de ambas Cámaras se completó con el reparto político de las presidencias de las comisiones parlamentarias. Unos cargos casi institucionales, mejor remunerados y destinados a los pesos pesados de los partidos. El PP retrasará la formación de estas comisiones de control del Gobierno hasta conocer la estructura y los nombres del nuevo Ejecutivo de Aznar.

Luis de Grandes, portavoz parlamentario del PP, y Luis Martínez Noval, del PSOE, cerraron sobre las once de la noche del martes, tras varias conversaciones telefónicas y hasta cinco rupturas, un acuerdo político para que Rudi y Aguirre resultasen elegidas presidentas de las Cámaras parlamentarias por una amplia y plural mayoría. El PSOE entró finalmente a ese pacto -que suscribieron también CiU, IU y Coalición Ca-naria- a pesar de que exigía como algo irrenunciable la vicepresidencia primera del Congreso, cargo que el PP se negó siempre a ceder invocando su "amplia mayoría" conseguida el 12-M y porque lo considera básico para arropar la figura institucional de la presidenta.Ni PP ni PSOE querían iniciar la VII Legislatura con una ruptura tan evidente en un asunto simbólico. La salida del atasco se provocó al incluir en el paquete de las negociaciones de la Mesa de la Cámara un reparto más favorable al PSOE del inicialmente previsto para los puestos de presidentes de las comisiones parlamentarias. Unos cargos con una categoría más institucional que la de diputado de a pie, que suelen destinarse para ex ministros o figuras históricas de los partidos y con un sueldo superior al base en 120.000 pesetas.

Cargos para ex ministros

En el PP se presume que Aznar compensará a algunos de sus ministros actuales, los que son diputados, con ese tipo de destino si se caen del cargo para la nueva legislatura. Y el PSOE suele utilizar ese rango para destacar la relevancia de algunos de sus políticos. En la VI Legislatura fueron presidentes de comisión los ex ministros Narcís Serra, José Borrell, Gustavo Suárez Pertierra, José Antonio Griñán y Carmen Alborch.

El Congreso disponía en la pasada legislatura de hasta 26 comisiones (permanentes y no permanentes legislativas y mixtas) para seguir el control del Gobierno: 18 las presidía el PP, cinco el PSOE, dos CiU y una IU. Ahora no se conoce aún cuál será ese escenario. Entre otras razones, y sobre todo, porque Aznar no ha definido todavía cómo será su nuevo Ejecutivo.

De Grandes ha conversado con los portavoces de los demás partidos para proponerles demorar unos días sobre lo establecido en el Reglamento de la Cámara (diez jornadas hábiles después de la constitución ayer de las Cortes; es decir, a partir del próximo 17 de abril) la formación de estas comisiones. Y ha justificado el retraso en que Aznar podría (en el PP se apunta que lo hará y en profundidad) transformar la estructura del nuevo Ejecutivo sobre el actual. Bien creando nuevos ministerios o cambiándoles el nombre (Innovación y nuevas tecnologías) o segregando algunos departamentos y uniendo otros (Economía y Hacienda, Educación, Cultura, Sanidad).

A Aznar le ha parecido bien que se posponga la formación de las comisiones parlamentarias, con otros nombres y componentes, hasta después de que él apruebe su nuevo Gabinete. La constitución formal de los grupos parlamentarios sí se producirá, conforme al reglamento, en cinco días, pero las comisiones se quedarán para después de la investidura de Aznar (25 y 26 de abril); de la formación de su Gobierno (27 de abril) y del primer Consejo de Ministros (28 de abril). La sesión solemne de apertura de la VII Legislatura, que presidirá el Rey, será también más tarde de los 15 días reglamentarios después de la constitución de las Cortes, para que Aznar acuda, el 3 y 4 de mayo, ya con su nuevo Gobierno.

Con esta negociación, lo que sí ha conseguido el PSOE es no perder apenas presidencias de comisiones con respecto a la anterior legislatura, pese a su desastre electoral. El PSOE tendrá ahora cuatro presidencias, las ya tradicionales para la oposición de Presupuestos, control de RTVE y la mixta sobre la Unión Europea; y otra de las de nueva creación según el organigrama del Gobierno y que el Partido Popular se ha comprometido a que sea de las importantes.

PP y PSOE se reunirán en próximos días para acordar el número de miembros de esas comisiones (siempre menos de 40) y los puestos de vicepresidentes. Populares y socialistas también han consensuado que CiU mantenga las dos presidencias de comisiones que ya disfrutaba y han premiado la adhesión a su acuerdo de Coalición Canaria facilitando el estreno como presidente de comisión de Luis Mardones, que dirigirá Defensa o Agricultura. Ni IU (que en la anterior legislatura tenía una presidencia) ni PNV entran en esta distribución de cargos.