La empresa de Chopera edificará una plaza de toros cubierta en Logroño El proyecto depende de la firma de un acuerdo con el Ayuntamiento

Las obras de la nueva plaza de toros de Logroño, semejante al coso donostiarra de Illumbe, con 11.000 asientos y cubierta móvil, pueden empezar en los próximos meses, con la idea de que se inaugure en el año 2001. El inicio de las obras está condicionado a la firma de un convenio urbanístico entre el Ayuntamiento de Logroño y la familia Chopera, que gestiona el coso de La Manzanera.

El actual recinto taurino de la capital de La Rioja, de propiedad privada, fue promovido en 1915 por un grupo de entusiastas aficionados y edificado por el arquitecto Fermín Álamo, uno de los más importantes en la historia de esta comunidad y pionero en la utilización del cemento armado.Desde hace 51 años, la familia Chopera regenta los destinos empresariales del recinto taurino de La Manzanera. En 1997 firmó un contrato de compraventa con los accionistas mayoritarios de la plaza, pero la operación -con un montante de 600 millones de pesetas- no se materializó hasta finales de 1999, con lo que ahora Chopera controla el 95% de las acciones de la vieja plaza, situada en el centro de Logroño y en condiciones penosas de conservación.

El nuevo propietario del coso no se quiere limitar a seguir explotándolo, sino que pretende la construcción de uno nuevo en unos terrenos próximos al actual, cedidos por el Ayuntamiento logroñés, previa recalificación de la zona que ahora ocupa el coso taurino.

Esta operación conllevará que los terrenos actuales se transformen en una nueva zona residencial. La empresa de Chopera desea sufragar parte de la construcción de la nueva plaza con la venta de los pisos que salgan del futuro solar.

Limitaciones

El Ayuntamiento logroñés ha presentado un convenio al empresario taurino con unas limitaciones en la edificabilidad de la nueva zona: "La altura y la disposición de los bloques es una potestad municipal y no puede depender de que a un particular le salgan o no sus cuentas", explica Julio Revuelta, concejal de Urbanismo.

Por su parte, Óscar Martínez, de la empresa de Chopera, señaló que el Ayuntamiento tiene que demostrar "voluntad política" para que los términos del convenio permitan una plaza "moderna y cómoda" para Logroño.

Fuentes de la empresa taurina califican el convenio presentado por el Ayuntamiento como "duro". Uno de los aspectos que ha descartado el concejal de Urbanismo es la construcción en los bajos de la futura plaza de cualquier "centro de ocio, restaurantes o cines".

El Ayuntamiento todavía no ha recibido respuesta, pero se da como seguro el inminente acuerdo y la puesta en marcha de las obras.

El proyecto de la nueva plaza es de los arquitectos vascos Diego Gazteiz y Javier Labad. El presupuesto supera los 2.000 millones de pesetas, de los que 700 corresponden a la cubierta móvil de un recinto que contará con 11.000 asientos, 1.000 más que el viejo coso, que pronto desaparecerá.