Restaurante Izaga Sencillas sorpresas

Desde que el pasado 14 de julio abrió sus puertas este coqueto y a la vez funcional restaurante, propiedad de la familia Suárez (patronos también del conocido Asador Araba), ha gozado de los favores del público vitoriano.Una de las causas de su éxito es la calidad de su cocina. Al frente de ella está, el gasteiztarra Aitor Basterra, uno de los jóvenes salidos de la fértil camada del Zaldiaran vitoriano, que pisaron lo alto del podio en el concurso de cocina creativa para jóvenes chefs celebrado hace unos años en la propia capital alavesa. Pese a tener aquí una estructura más sencilla en sala y cocina, las buenas ideas de este joven creador de 30 años, aunque más sosegadas y asentadas, no son menos sugerentes que en su anterior etapa.Su carta esta entreverada de platos de producto, fórmulas clásicas adaptadas y chispazos imaginativos. Perfecto de punto el pulpo a la gallega, presentado de forma vistosa. Muy delicado el tartar de lubina con mejillones, tan humildes como gloriosos. Gran idea bien resuelta la de las alcachofas frescas -fritas y confitadas- con habas y kokotxas de merluza. De una simplicidad popular obtiene resultados sorprendentes, como es el caso de los huevos revueltos con morcilla de arroz -en forma de tian- sobre tomate confitado y un emocionante caramelo de piquillos. Gusta a rabiar a todos el salteado de pasta sobre carpaccio de hongos, que se magnífica con una quebradiza teja de queso Idiazabal, así como una yema cruda que al romperla impregna de untuosidad el conjunto. Correcto el bacalao asado con ragú de verduras y tan gustoso como delicado el foie gras sobre guiso de manitas y oreja de cerdo.

Postres muy modernos y, por tanto, ligeros, como la versión dulce de un invento genial de su cosecha, el jugo de tomate transparente, en este caso coronado por helado de yogur y granizado de naranja con pimienta y azafrán. Servicio eficaz, aunque lógicamente cogiendo forma. Carta de vinos escueta dada la juventud del negocio. Puede y debe de ir a más.

Datos prácticos: Beato Tomás de Zumarraga, 2 -esquina de Cercas Bajas- (Vitoria).

Teléfono: 945 13 82 00.

Tarjetas: sí.

Precio medio: 4.500 pesetas.

Puntuación: 6,5/10 (provisional).

Cierra: lunes.

Parking: no.