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Atentado contra un destacado dirigente reformista iraní

Ángeles Espinosa

Said Hayarián, destacado dirigente reformista iraní y asesor del presidente Mohamed Jatamí, se debatía anoche entre la vida y la muerte en un hospital de Teherán después de que dos desconocidos dispararan contra él a primera hora de ayer. Jatamí, que se hallaba de visita en Yazd, su provincia natal, calificó de "repugnante" el atentado y, visiblemente emocionado e indignado, subrayó su "firme determinación de luchar sin piedad contra el terror, la violencia y el asesinato".

El ataque se produjo a las nueve menos veinte de la mañana en el momento en que Hayarián, que es teniente de alcalde de Teherán, se dirigía al Ayuntamiento, en el centro de la capital. "Iba a aparcar cuando dos hombres armados se le acercaron y dispararon dos veces contra él. Una de las balas le entró por la cara y se le ha quedado alojada en el cuello cerca de la nuca", relató por teléfono a EL PAÍS uno de sus correligionarios, Hamid Hushanguí, tras visitarle en el hospital Sina. Hayarián, de 47 años, se encontraba en coma en la unidad de cuidados intensivos y los médicos esperaban ver cuál era su evolución antes de decidirse a extraer la bala. "Hay pocas esperanzas", declaró a este diario una fuente hospitalaria. Al parecer, el proyectil se encuentra alojado entre la 33ª y la 34ª vértebra, aunque no ha llegado a tocar la médula espinal. La segunda bala le rozó un hombro.

"La calle estaba llena a esa hora. Hay muchos testigos, incluso algún concejal, que han visto como huían en una moto de gran cilindrada. Espero que les cojan", manifestó Hushanguí. Este miembro del Frente de Participación, el grupo que obtuvo un mayor número de escaños en las pasadas elecciones y de cuya ejecutiva forma parte Hayarián, tiene claro quiénes están detrás del atentado: "La gente que no respeta los deseos de los demás, los que están contra las reformas y la libertad".

Los testimonios coinciden. Dos hombres jóvenes, de unos 26 o 27 años, con barba, pero cuyas caras iban cubiertas por sendos cascos. La clave, el vehículo en el que huyeron, una moto de 1.000cc, cilindrada que en Irán sólo pueden utilizar las fuerzas de seguridad. Según declaraciones de testigos recogidas por la agencia Reuters, los policías armados que vigilan la sede municipal no intentaron detener a los agresores, un dato que oscurece aún más el suceso. Con posterioridad, se puso en marcha un vasto despliegue policial para intentar su localización.

Hayarián, que fue viceministro de los servicios secretos, se encontraba en los últimos meses en el punto de mira de los conservadores por su trabajo como director del diario reformista Sobh-e Emruz (La mañana de hoy). En calidad de tal tiene abiertas al menos ocho causas judiciales. Según personas cercanas a él, había recibido amenazas, pero rechazó la posibilidad de llevar guardaespaldas. Los servicios secretos le reprochan haber publicado informaciones "confidenciales" sobre los asesinatos en serie de intelectuales que se produjeron en 1998.

Su último "atrevimiento", dar cabida en sus periódicos a los artículos de Akbar Ganyí recordando que durante el mandato del ex presidente Alí Akbar Hachemí-Rafsanyaní se produjeron cerca de un centenar de asesinatos políticos. EL PAÍS intentó ayer sin éxito hablar con Ganyí. "No debe aparecer en ningún sitio, ya que él también está en la lista", justificó una persona próxima a él, sin ocultar la preocupación que existe en medios reformistas por lo sucedido.

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Apenas unas horas después del atentado, el vespertino Aftab-e Emruz (también reformista) publicaba una caricatura de un hombre con la cara cubierta y pistola en mano diciendo: "Su Excelencia, misión cumplida". El tratamiento "Su Excelencia" lo ha utilizado Ganyí para referirse a Rafsanyaní ("Su Excelencia vestida de rojo"). En un editorial titulado Un tiro contra el pueblo, el mismo periódico da a entender que Hayarián no es el único reformista amenazado y cita los nombres del propio Ganyí y de Abbas Abdí. De momento, el Ayuntamiento de Teherán ya ha anunciado que pondrá guardaespaldas a todos los concejales con especial relevancia política.

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Sobre la firma

Ángeles Espinosa
Analista sobre asuntos del mundo árabe e islámico. Ex corresponsal en Dubái, Teherán, Bagdad, El Cairo y Beirut. Ha escrito 'El tiempo de las mujeres', 'El Reino del Desierto' y 'Días de Guerra'. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense (Madrid) y Máster en Relaciones Internacionales por SAIS (Washington DC).

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