El Gobierno argelino anuncia la privatización de la mayor parte del monopolio de hidrocarburos Sonatrach

El Gobierno argelino ha decidido poner fin al monopolio estatal sobre los hidrocarburos con la privatización de Sonatrach, la empresa estratégica por excelencia de la economía argelina. El ministro de Energia, Chakib Jelill, que hizo ayer el anuncio, precisó que la venta de acciones se hará a través de la Bolsa de Argel. El Estado seguirá siendo el socio mayoritario, pero la privatización puede alcanzar hasta un 70% del capital. Según los analistas, será la mayor operación de estas características realizada en los últimos años en el Magreb y puede alcanzar varios miles de millones de dólares.Los hidrocarburos proporcionan a Argelia más del 95% de sus exportaciones y, aunque el sindicato de Sonatrach se opone a la venta, el Gobierno parece haber tomado una decisión sin marcha atrás. El primer ministro, Ahmed Benbitur, declaró esta semana que la empresa tiene que ser más competitiva o "será aplastada por la competencia mundial". Sonatrach controla no sólo la extracción, el transporte y la venta del petróleo y del gas argelino, sino también las instalaciones industriales de refinado, tratamiento y licuefacción.

Algunas empresas internacionales presentes en el país ya han mostrado su interés por la privatización. Es el caso de la italiana ENI, que está en tratos con Repsol para una posible fusión. La francesa Total, asociada en Argelia con Cepsa, también está interesada. Falta por ver la reacción de los grandes consorcios anglosajones que dominan el mercado en Argelia. En particular, el formado por la británica British Petroleum y las estadounidenses Amoco y Arco.