El complejo lúdico de Heron prevé atraer a cinco millones de visitantes

Cuando el complejo lúdico que la inmobiliaria británica Heron construye en el distrito de Nou Barris de Barcelona abra sus puertas el año proximo, culminará algo más que un proyecto que dará empleo a un millar de personas. Los terrenos de la antigua Renfe Meridiana albergarán 16 salas de cine, áreas de juegos infantiles y de restauración, un hotel de 143 habitaciones y un aparcamiento de 1.600 plazas, una oferta de entretenimiento que prevé atraer a unos cinco millones de visitantes al año procedentes en su mayoría de la conurbación de Barcelona.

La apuesta por los terrenos de Renfe Meridiana, donde estará ubicado el centro de ocio de 34.000 metros cuadrados, le ha supuesto a Heron y al grupo inmobiliario catalán Layetana, que aporta el 20% del capital, una inversión de 18.900 millones de pesetas, la más importante que el capital privado lleva a cabo en este distrito barcelonés donde hasta ahora las actuaciones más relevantes se habían financiado con fondos públicos.Los promotores han cuidado la estética de los edificios que rodean la plaza central del recinto para que no desentonen con la sobriedad de la arquitectura local.

Actualmente los trabajos se centran en la cimentación del recinto, del que es autor el estudio de arquitectura Juli Capella. El proyecto está inspirado en el propio mapa de la ciudad: con un edificio al fondo que simboliza el mar y otros dos delante que representan la montaña barcelonesa y de Montgat, cerrando la plaza central por donde discurrirá el ir y venir de visitantes. Capella quiso dejar claro ayer que se ha optado por unos edificios de gran calidad que no tienen nada que ver con "un centro comercial de la periferia". El arquitecto puntualizó que no se trata de un mero contenedor de usos, sino que se ha buscado un recinto que armonice en todo momento con la arquitectura de la ciudad. La superficie construida será de 103.000 metros cuadrados, es decir, el 20% más que lo que ocupa una manzana del Eixample.

Cines y bolera

Los operadores que participan en el centro Heron City explicaron ayer a la prensa en qué consistirá su aportación. Cinesa invertirá 3.000 millones de pesetas en las 16 salas que su director general, José Batlle, definió como el buque insignia de la empresa. Los cines estarán equipados con pantallas gigantes de 9 metros de alto por 20 de ancho y con butacas en forma de gradas por las que calculan desfilarán 1.400.000 espectadores al año. Cirsa destinará 500 millones a los 3.800 metros cuadrados dedicados al ocio, que albergarán una bolera de 22 pistas, salas de videojuegos y salas de realidad virtual, además de un parque infantil. La firma surafricana Healthland construirá un gimnasio con piscina incluida.

La oferta de restauración incluirá la cocina temática, la rápida y la tradicional en locales que se situarán en la primera planta. La cadena Accor construirá un hotel de 3 estrellas de 143 habitaciones dirigido a ejecutivos y visitantes en una zona donde escasean este tipo de establecimientos. La tercera planta del complejo acogerá los pubs y discotecas.

Para el Ayuntamiento de Barcelona, éste es un proyecto muy especial. No en vano le ha costado mucho que cristalizara en los terrenos de Renfe Meridiana una actuación que contribuyera a dinamizar la zona. Por el camino han ido quedando iniciativas que por distintos motivos no llegaron a buen puerto y que han hecho languidecer el entorno situado junto al antiguo cementerio de Sant Andreu.

Durante el anterior mandato municipal, el distrito de Nou Barris, el más habitado de los de Barcelona, fue una de las áreas que más se beneficiaron de las inversiones públicas, en su mayoría municipales.