Un galeón en el Urumea

La asociación de comerciantes Catedral-Centenario, del centro de San Sebastián, quiere instalar un galeón del siglo XVI en el río Urumea, a modo de reclamo turístico y motor de la actividad comercial y de ocio de la ciudad. Tras siete años madurando la idea, sus impulsores presentaron ayer en el Ayuntamiento donostiarra la maqueta del galeón San Mateo, un navío de 50 metros de eslora (longitud) y 14 metros de manga (anchura) que quedaría atracado permanentemente en uno de los márgenes del río, entre el puente de María Cristina y el cuarto puente, ahora en construcción.La reproducción de este modelo de galeón, una de cuyas réplicas se construyó en el siglo XVI en los astilleros de Pasajes para la carrera de Indias, tendría un coste de entre 400 millones y 1.000 millones de pesetas, explicó Juan Carlos Benavides, presidente de Catedral-Centenario. "Algunos inversores están interesados en participar el proyecto, pero nuestro deseo es que un promotor asuma esta idea", agregó.

El autor del proyecto y del prototipo a escala, Carlos Corcobado, ha respetado las características externas del barco de madera original, con todo el entramado de velas, cuerdas y demás aparejos marinos. En el interior ha proyectado un restaurante "de calidad", un servicio de hotel con entre 10 y 20 camarotes orientados a una fachada acristalada situada bajo la popa, un recinto para establecimientos comerciales, librería, un área expositiva y un café-teatro para representaciones y conciertos.

La altura del galeón, 50 metros con sus palos, exigiría mantenerlo varado en el mismo lugar, pues los vanos de los puentes del curso fluvial no permiten hacerlo navegar por el río. Sería un barco que sólo navegaría por Internet, gracias a unas cámaras de televisión que llevaría conectadas durante las 24 horas del día para su observación a través del ordenador. Catedral-Centenario pretende aprovechar esta tribuna cibernética para mostrar en ella los 400 comercios que forman la asociación.

Los creadores de la idea reconocieron las dificultades técnicas que entrañará la construcción in situ de la reproducción del galeón San Mateo, y se inclinaron por asentarlo sobre un pantalán gigante con una base de cimientos que sólo admita los movimientos provocados por la marea. El coste del proyecto se encarecería si se opta por agregarlo a la estructura fija de la orilla del Paseo Árbol de Gernika, lo que obligaría a solicitar permisos a la Dirección de Costas del Ministerio de Medio Ambiente. Corcobado afirmó que la solución ideal sería ésta, "para hacer una cosa similar al Náutico".

En Catedral-Centenario están convencidos de que "la afluencia de público estaría garantizada, como sucede con la carabela de Colón, en Barcelona, o con el barco chino en Amsterdam", dijo Benavides, quien no descartó redondear la idea creando "un pequeño muelle junto al galeón para atender a la demanda de alquiler de botes de recreo.